Ante una comitiva socialista muy grande representada por el alcalde de Tarragona, Rubén Viñuales; la alcaldesa de Reus Sandra Guaita o la miembro de la Mesa del Parlamento, Rosa M. Ibarra; Valeriano Pino se ha convertido en el alcalde de Torredembarra tras un año de alcaldía de ERC, tal y como pactaron con los resultados de las elecciones municipales de 2023.
El representante del PSC Torredembarra estará en la alcaldía durante dos años. “Hoy vivimos un cambio de alcalde, pero no un cambio de gobierno”, porque Pino promete que “la torre” necesita estabilidad y así será la política de este pacto. Un discurso que demuestra que el pacto de ERC, PSC y Junts en Torredembarra va a una, porque así también lo dejaba caer Eduard Rovira en la entrevista de este medio hace una semana.
El ahora alcalde se ha mostrado dialogante y respetuoso con la oposición, porque “no va de un partido eso, va de Torredembarra”. También ha dedicado unas palabras al exalcalde Eduard Rovira, porque “se queda a ayudar” y porque ha sido un gran compañero político.
Finalmente, ha demostrado con sus primeras palabras como alcalde de Torredembarra que quiere luchar por la especulación de la vivienda y que este pacto de gobierno quiere cerrar proyectos como la construcción del CAP o el antiguo matadero.
Vale Pino ha hecho un pequeño balance de este primer año. “Hemos tenido que reaccionar para no entrar en quiebra económica”, ya el gobierno ha estado luchando con esta situación económica, que ahora es buena, para no perder servicios que no son obligatorios, como guarderías o la escuela de música.
