Tarragona ha vivido este jueves una nueva jornada de reivindicación y compromiso social con motivo del 1 de mayo. Cerca de 300 personas han respondido al llamamiento sindical y han recorrido las calles de la ciudad para defender los derechos laborales y reclamar mejoras reales en condiciones de trabajo, servicios públicos y movilidad. La movilización, convocada por UGT y CCOO, ha comenzado a las 12 del mediodía en la plaza Imperial Táchira y ha avanzado por el centro bajo el lema “Proteger las conquistas, ganar el futuro”.
La protesta ha congregado a trabajadores y trabajadoras de diversos sectores, así como a colectivos sociales que han querido hacer visibles sus propias luchas. Uno de los momentos más destacados de la jornada ha sido la intervención de la plataforma Dignidad en las Vías, que ha denunciado el mal estado del sistema ferroviario en el territorio y las graves consecuencias que tiene sobre la vida de la clase trabajadora.
“Sin movilidad, no hay igualdad de oportunidades; y sin igualdad de oportunidades, no hay democracia real”, ha reivindicado Anna, portavoz de la plataforma, en un discurso cargado de contundencia y emoción. “Trabajamos para vivir, pero depender del tren a menudo significa renunciar a la vida personal, social e incluso a la salud”. A su vez ha querido hacer reflexionar sobre que mucha parte del “caos que se vive en la AP-7, y parte de la crisis de la vivienda en ciudades como Barcelona, se podrían atenuar con un sistema ferroviario digno. ” Queremos soluciones, no excusas”, han concluido.

En la movilización también han participado trabajadores de PortAventura, que han llevado pancartas propias exigiendo un convenio laboral más justo.
Durante la manifestación, se ha hecho sentir la necesidad de reformas estructurales para mejorar las condiciones de vida de la clase trabajadora: jornada laboral de 37,5 horas, más estabilidad laboral, salarios dignos y servicios públicos robustos. Los manifestantes también han puesto el acento en cuestiones como la vivienda, la digitalización justa o la lucha contra la precariedad.
La jornada se ha desarrollado sin incidentes y ha concluido con la lectura de varios manifiestos. Este 1 de Mayo, Tarragona no sólo ha celebrado el Día del Trabajo: lo ha convertido en un llamamiento colectivo a la dignidad.