El alcalde de Roda de Berà, Pere Virgili, convocó de urgencia una reunión de la Comisión Local de Patrimonio para abordar el incidente que tuvo lugar en el histórico edificio de Cal Guivernau. En la reunión, encabezada por la concejala Laura Moya, participaron miembros de todos los grupos municipales, así como representantes de la dirección facultativa de la obra y el arquitecto municipal.
La Comisión decidió suspender las obras de rehabilitación del edificio y también acordó la rescisión del contrato mercantil con la empresa adjudicataria. El incidente dejó la fachada principal del edificio parcialmente hundida.
Con el objetivo de garantizar la seguridad, el Ayuntamiento ha anunciado que adjudicará de urgencia a una empresa especializada en derribos complejos. Estos profesionales, con el asesoramiento de un arquitecto perito especializado en este tipo de trabajos, serán los encargados de hundir la fachada restante y de investigar las causas del incidente.
Los vecinos y vecinas de las viviendas adyacentes no podrán acceder a sus domicilios hasta que el derribo se haya completado. Desde el Ayuntamiento se pide que la gente no se acerque al lugar de los hechos y que se respete la línea policial por la seguridad de todos.