Junts reivindica que la instalación de las cámaras de videovigilancia en la Part Alta, anunciada por el Ayuntamiento de Tarragona, es fruto del acuerdo presupuestario entre Junts y el gobierno del PSC para 2025. Esta actuación forma parte del paquete de 522.000 euros conseguido por Junts para reforzar la seguridad en la ciudad, que incluye la instalación de cámaras de videovigilancia y la incorporación de drones para la Guardia Urbana.
Este no es el primer paso que Junts da en materia de seguridad. Los juntantes reivindican que “ya consiguieron que se destinasen recursos para instalar cámaras en la Parte Baja, una zona que reclamaba más vigilancia desde hacía tiempo. Con la incorporación de estas nuevas cámaras en la Parte Alta, se asegura un modelo de ciudad más protegida, dando respuesta a las demandas de los vecinos y reforzando la presencia de la Guardia Urbana”.
“Este proyecto no ha caído del cielo. Es el resultado del trabajo realizado por Junts, que condicionó su apoyo a los presupuestos a garantizar una inversión real en seguridad. Si hoy hablamos de estas cámaras, es porque Junts lo consiguió en la negociación”, ha afirmado el portavoz del grupo municipal, Jordi Sendra.
Junts recuerda que esta inversión no sólo permitirá ampliar la red de videovigilancia, sino que también dotará a la Guardia Urbana de nuevas herramientas tecnológicas, como los drones, para mejorar la eficacia y rapidez de las actuaciones. Es fundamental el uso de la tecnología para prevenir y disuadir la delincuencia.
Junts mantiene que “seguirá trabajando para que la seguridad sea una prioridad en la acción del gobierno y para que las inversiones en este ámbito no sean una cuestión de oportunismo político, sino una estrategia estructural para hacer de Tarragona una ciudad más segura para todos”.
Tarragona escucha ofertas por el contrato de las cámaras de videovigilancia en la Parte Alta
