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Agentes de los Mossos d’Esquadra detuvieron el pasado viernes en Altafulla (Tarragonès) a dos hombres y una mujer, de 64, 55, 43 años respectivamente, como presuntos autores de los delitos contra la salud pública y defraudación de fluido eléctrico.
La investigación se abrió a principios del mes de octubre a raíz de una información recibida sobre la posible existencia de una plantación interior de marihuana en un chalé del municipio de Altafulla.
En las diversas vigilancias, los agentes comprobaron que el inmueble presentaba características compatibles con el cultivo intensivo interior de marihuana.
En el transcurso de uno de los seguimientos, los agentes detectaron que dos de los investigados estaban realizando movimientos de material del interior de la casa y loarrojaban en una furgoneta.
Ante la posibilidad de que los investigados estuvieran trasladando la droga, los mossos montaron un dispositivo policial que permitió detener el vehículo en la calle Ronda d’Altafulla con los dos investigados dentro, un hombre y una mujer.
En el arresto localizaron en la parte posterior de la furgoneta una gran cantidad de sacos llenos de arena y utensilios necesarios para el cultivo de marihuana.
Por todo ello, los Mossos los detuvieron y motivaron la solicitud de la correspondiente autorización judicial de entrada y perquisición en el chalé.
Durante el transcurso de estas gestiones los agentes identificaron a un individuo que salía del inmueble investigado. Rápidamente lo interceptaron y también lo detuvieron por su participación en el cultivo y tráfico de drogas.
El sábado al mediodía se llevó a cabo la entrada y perquisición que se saldó con la localización en la planta baja de la casa de cerca de un millar de plantas de marihuana en una fase inicial de crecimiento. También localizaron e intervinieron hasta 46 kg de cabellos de marihuana ya secados y tratados para poder ser distribuidos en el mercado ilícito.
Asimismo también se intervino infraestructura y material necesario para favorecer el crecimiento de las plantas, una decena de secaderos verticales, 74 focos, 33 ventiladores, 31 transformadores, 579 testeos vacíos, 12 compresores, varios filtros y bidones de agua.
Una vez finalizada la entrada, los operarios de la compañía suministradora desmontaron el cuadro eléctrico dado que ponía el espacio en grave riesgo de incendio. Los detenidos pasaron ayer a disposición del juzgado de instrucción en funciones de guardia de El Vendrell.
