El Barça dejará de jugar en Montjuïc a partir del 23 de abril y el ‘Clásico’ se tiene previsto jugar para el fin de semana del 11 de mayo, con la incógnita de cuál será el estadio que acoja el partido. La primera opción siempre ha sido jugar en el Camp Nou reformado, pero las obras alargarían el retorno de los culés, por eso el presidente del Nàstic ha ofrecido el Nou Estadi.
Aunque es el partido más importante del año y reúne a millones de espectadores, desde el Barça no se han mostrado excesivamente preocupados por conocer dónde se jugará el ‘Clásico’. Durante las últimas jornadas se ha rumoreado con la posibilidad de trasladar el partido fuera del país, pero todavía no se ha confirmado ninguna alternativa. Por ello, el presidente de la entidad grana, Lluís Fàbregas, ha declarado a El Diari de Tarragona que “el Nàstic podría ceder sus instalaciones del Nou estadi para este partido”.
Lluís Fàbregas: “El Nàstic podría ceder sus instalaciones del Nuevo estadio por el ‘Clásico'”
Joan Laporta no se ha mostrado excesivamente preocupado, pero los aficionados ya se preguntan dónde se jugará el próximo Barça-Madrid. Aunque el club azulgrana quiere alargar su estancia en Montjuïc si no llega a tiempo el Camp Nou, el calendario musical impediría esta posibilidad. Especialmente porque la gira de los Rolling Stones aterriza en Barcelona durante el mes de mayo, necesitando días previos para instalar un escenario y acondicionar el estadio.
En el caso en que no se pueda jugar en la Ciudad Condal, el Barça quiere que el ‘Clásico’ se dispute en un lugar cercano, por lo que el Nou Estadi o el estadio de Montilivi en Girona serían opciones atractivas. Además, también existiría la opción del Johan Cruyff, pero la capacidad no gustaría a ninguno de los equipos. Igualmente, también han sonado recintos como La Cartuja en Sevilla, el Wanda Metropolitano en Madrid o en otras ciudades europeas como París o Londres, con el impacto económico que significaría para los clubes.
Todavía no se conoce la decisión del Barça, Madrid y LaLiga, pero con el paso de los días la posibilidad de que no se juegue en Barcelona es mayor. El Nou Estadi de Tarragona podría ser la opción perfecta a poco más de una hora de distancia y con capacidad para más de 14.500 aficionados, lo que significaría que la capital de la Costa Dorada se transformaría durante un día en el objetivo de millones de aficionados.