El ingenio de los contrabandistas de drogas en el aeropuerto de El Prat no conoce límites y la Policía casi podría asegurar que las ha visto de todos colores en los controles aduaneros, pero de tanto en tanto, todavía se sorprenden por los lugares escogidos por los delincuentes para tratar de colar droga en el país.
La última de estas sorpresas se la llevaron efectivos de la Unidad Local de Análisis de Riesgos (ULAR) de la Guardia Civil y la Agencia Tributaria en el Aeropuerto Josep Tarradellas Barcelona-El Prat mientras inspeccionaban un paquete que había llegado desde Quito, en Ecuador, el pasado 15 de noviembre.
Según ha informado la Benemérita, los agentes estaban inspeccionando dos sillas de montar caballo en los almacenes de una empresa de transportes ubicados en el aeropuerto cuando se permitieron de algunas anomalías, motivo por el que profundizaron la inspección.
Fue entonces cuando hicieron un hueco en una de las monturas y encontraron una sustancia sospechosa que resultó ser cocaína, una vez analizada. El pasado 12 de diciembre, la Policía hizo una entrega controlada de los paquetes a sus destinatarios, que quedaron detenidos por un delito contra la salud pública por tráfico de drogas. Se trata de dos hombres de nacionalidad colombiana y de 22 y 25 años.