Un incendio agrícola cerca del club deportivo Carrilet y la urbanización Can Pi, en Terrassa, ha obligado a confinar estas dos zonas este jueves por la tarde, después de que las llamas, inicialmente estabilizadas, hayan revivido por la afectación del viento provocado por una tormenta cercana. El fuego, que ha comenzado hacia las 15:30 horas, ha requerido la intervención urgente de los Bomberos de la Generalitat, que están trabajando activamente con 16 dotaciones terrestres y 4 aéreas para controlar la situación.
En Terrassa, seguimos con 20 dotaciones #Bomberscat 4 de ellas aéreas en el incendio cerca del Club Carrilet (aviso 15.30 h). Hemos pedido a los usuarios del club y los residentes de Can Pi que no salgan del recinto ni de casa. Ahora llueve con fuerza pic.twitter.com/LMfovMNE7t
– Bomberos (@bomberscat) July 3, 2025
El cuerpo de emergencias ha activado inmediatamente el Plan INFOCAT para hacer frente a la propagación de las llamas y se ha pedido precaución a la población. A través del sistema de alertas móviles Es-Alert, se ha notificado a los residentes la orden de confinamiento para evitar cualquier riesgo derivado del incendio.
Hasta el momento, no se ha especificado el número exacto de usuarios que se encuentran en la zona del club o en la urbanización, que acoge a unas 85 personas. A pesar de la intensificación del fuego, las autoridades locales no han informado de daños personales, aunque las tareas de extinción continúan.
Son imágenes del incendio de Terrassa, revivido por el viento, desde el club Carrilet: los usuarios han sido confinados por la proximidad de las llamas https://t.co/aJM2k0wLpA
Imágenes: Nacho Callejas pic.twitter.com/8TTPTaqv7k
— 324.cat (@324cat) July 3, 2025
Las autoridades municipales continúan evaluando la situación y piden a la ciudadanía que se mantenga alejada de la zona afectada para evitar posibles riesgos y para garantizar que los equipos de emergencia puedan trabajar con la máxima seguridad. Mientras los Bomberos luchan contra el fuego, se pide la máxima colaboración de la población para respetar las restricciones y evitar cualquier movimiento que pudiera obstaculizar las operaciones de extinción.