El Sindicato de Inquilinos ha reinstalado este miércoles la puerta de una finca situada en el número 33 bis de la calle Magalhaes de Barcelona retirada hace dos semanas por una empresa de desempleo.
Según explica el movimiento de defensa de los derechos en la vivienda, el edificio pertenece al fondo buitre ruso Workki Co-working, que contrató a la firma Stop Okupas para “expulsar extrajudicialmente” a los habitantes del bloque. Hace dos semanas esta empresa habría retirado la puerta de la finca, según la versión del sindicato, que hoy se ha dirigido a la finca para poner una nueva, en un acto que ha contado con la participación de medio centenar de personas y en el que se ha vivido algún momento de tensión por la presencia de miembros de Stop Okupas.
Según explica la entidad, hace cuatro meses que los vecinos de la finca están sometidos un acoso “brutal” de la empresa de desempleo, que han intentado detener “a través de todas las vías políticas, jurídicas y administrativas posibles”.
Hace una semana, asegura la misma fuente, una vecina del edificio “se vio forzada a marcharse de su hogar por la violencia a la que estaba siendo sometida”, y también afirma que se ha marchado el inquilino del principal.
Entre las acciones de la empresa de desempleo que el sindicato denuncia está la violación de un domicilio, el atasco tres veces de un bajante -con inundaciones en el piso principal-, cortes de luz en la finca, una agresión física a uno de los vecinos y finalmente la retirada de la puerta restituida hoy.
También afirman que desde hace tres semanas hay miembros de la empresa de manera permanente a la entrada de la finca y que los vecinos han organizado guardias de 24 horas para “evitar nuevos sabotajes y agresiones”.
Según la entidad, hay seis denuncias presentadas a los Mossos, dos de las cuales están en manos de juzgados. También hay una denuncia administrativa por acoso presentada ante el Ayuntamiento, asegura el Sindicato de Inquilinos. Esta misma tarde se ha interpuesto una querella contra la administradora y los apoderados de la empresa propietaria y los directivos y trabajadores de Stop Okupas.
