La Sindicatura de Greuges de Barcelona ha instado al Consorcio de Educación a garantizar la equidad para los alumnos con necesidades educativas específicas (NEE). Lo ha hecho después de analizar dos casos muy cercanos en el tiempo. En el primero, un ciudadano presentó una queja porque se exigía a una familia con NEE, por razones socioeconómicas, llevar una tableta digital a la escuela que debía adquirir a través de un proveedor concreto, sin alternativas como el préstamo o la compra en otro establecimiento. En el segundo caso, la asociación de familias de un centro denunciaba la “falta de ayuda” para garantizar que todo el alumnado pudiera hacer natación en horario lectivo.
En el primer caso, la Sindicatura solicitó información al Consorcio, quien respondió que el plan de choque contra la segregación escolar y el programa de las mochilas económicas sólo cubren las actividades complementarias, libros y material escolar, pero no dispositivos digitales como las tabletas. El síndic ha valorado que esto supone “un agravio comparativo” para los alumnos y sus familias, con un impacto negativo en el desarrollo de las competencias digitals y la igualdad de oportunidades.
En el segundo caso, las clases de natación estaban incluidas en el Proyecto Educativo del Centro, aprobado en 2019, pero actualmente sólo se cubre el coste de los monitores de apoyo para los alumnos de primero de primaria, gracias a un programa concreto. La AFA considera que la falta de financiación a I5 y segundo genera “una clara situación de discriminación”.
Con todo, la Sindicatura considera “insuficiente” la actuación del Consorcio de Educación para garantizar el derecho a la educación y ha recomendado adoptar medidas para asegurar que el alumnado con necesidades educativas específicas pueda participar en condiciones de igualdad en el proyecto educativo del centro, evitando así que se repitan situaciones en las que no se garantice un trato equitativo.