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Un grupo de padres de Sant Cugat del Vallès ha decidido denunciar ante los Mossos d’Esquadra una cuenta de Instagram que difundía rumores y mensajes ofensivos contra varios adolescentes del municipio. El perfil @cotilleoo_sancuu, creado de forma anónima, permitía a los usuarios publicar acusaciones, calumnias, rumores, insultos o violaciones de la intimidad, sobre menores de edad de la zona. Esto, aún se veía más agravado por el hecho de que muchas de estas publicaciones incluían acusaciones de prácticas sexuales, enfermedades de transmisión sexual y otros comportamientos personales, dirigidos principalmente a jóvenes de diversos institutos de la ciudad.
Los padres han identificado varios perfiles anónimos creados con el objetivo de protegerse en caso de cierre de la cuenta, y consideran que estas acciones constituyen un caso de acoso escolar virtual amplificado por el anonimato que ofrecen las redes sociales como Instagram y NGL. Asimismo, el hecho de que los creadores de estas cuentas utilicen nombres falsos dificulta su identificación y aumenta el daño psicológico a los afectados, tal y como denuncian varios padres, incluido el periodista local Ausi Llombart.
Lombart, ha compartido a través de sus redes sociales: “Ya basta del acoso, venga de donde venga y se exprese cómo se exprese. Se ha acabado la broma, porque lo que por pocos es una broma, por lo demás son afectaciones psicológicas. Tolerancia cero”.
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Esta situación ha puesto de manifiesto la creciente preocupación entre las familias sobre el uso irresponsable de las redes sociales por parte de los adolescentes, un fenómeno que se ha visto amplificado durante los últimos años. Los padres afirman que muchos jóvenes no denuncian estos hechos por miedo o vergüenza hasta que las consecuencias son irreparables.
Tras las denuncias, la cuenta original ha sido desactivada, pero han surgido otros perfiles similares que continúan difundiendo los mismos rumores, según ha afirmado el propio Llombart. Los Mossos han iniciado una investigación para identificar a los autores de estos mensajes, que podrían estar cometiendo delitos contra el honor y, en algunos casos, incluso delitos relacionados con la pornografía infantil, si se demostrara la difusión de contenidos de este tipo. Los padres de los posibles responsables, si son menores de edad, también podrían ser responsabilizados legalmente.
Los vecinos de Sant Cugat esperan que esta denuncia sea un punto de inflexión para frenar el acoso juvenil en línea y garantizar que los responsables de difundir rumores malintencionados y calumnias respondan por sus acciones.
