Las Fiestas de Primavera 2025 de L’Hospitalet reunieron a más de 33.000 personas en una edición que ha estado marcada para la conmemoración del centenario del otorgamiento del título de ciudad. Durante los cuatro días de celebración se han desplegado en los distritos una octogésima de actividades impulsadas por las entidades y el Ayuntamiento.
Las Fiestas de Primavera apuestan por una programación musical y diversificada que este año atrajo a más de 16.000 personas. No obstante, esta edición ha estado marcada por la climatología, que obligó a cancelar los conciertos al aire libre previsto para el sábado por la noche y dos actividades del domingo por la tarde.
Así pues, el sábado se vieron afectados los últimos conciertos en el parque de La Remunta, en los jardines de Can Sumarro, en el parque de La Guingueta y en la “plaza de la Baldosa”. El domingo, la lluvia interrumpió el espectáculo de Payasos sin Fronteras en la plaza de la Carpa y se canceló el concierto sinfónico previsto en la exposición de bonsais en los jardines de Ca n’Arús.
Los conciertos despuntan como una de las actividades con más éxito de participación. En cuanto a las novedades de este año, los conciertos tributo a referentes del rock nacional e internacional, que tuvieron lugar en la “plaza de la Baldosa”, reunieron a 2.300 personas. Otras novedades de esta edición fueron la sesión especial de Diversasiones en la Sala Salmandra, un evento pensado para ofrecer un espacio de inclusión a las personas con diversidad funcional intelectual, y la Fiesta Joven +16 – Sudor XL, abierta a jóvenes a partir de dieciséis años y que tuvo lugar en esta misma sala.
El consolidado Primavera in Black —con conciertos de pequeño formato en torno al blues y la música negra— reunió a 2.400 personas en los jardines de Can Sumarro. Y los populares conciertos en el parque de la Remonta congregaron a cerca de 8.000 asistentes. El domingo, como clausura a dos días de conciertos, Mojinos Escozíos llenaron de gom a gom el espacio con su humor irreverente y su inconfundible energía rockera.
ÒPAL’HA!, un espectáculo novedad de esta edición, que fusionaba artes de calle, circo, clown, danza, música, rimas y grafitos, convirtió el parque de la Guingueta en un escenario lleno de creatividad con artistas multidisciplinarios y atrajo a 2.300 personas.
A La Farga asistieron cerca de 1.000 personas en un recuerdo especial en la década de los 90 con La noche de oro del pop español, por la que pasaron algunos de sus protagonistas: Rafa Sánchez de la Unión, Amistades Peligrosas, Cómplices, Javier Ojeda de Danza Invisible y Raul Orellana, DJ de Estudio 54.
Este año, la jornada de puertas abiertas en la casa consistorial del sábado por la mañana fue un éxito, con 309 visitantes. Fue una edición especial, marcada por una visita teatralizada en el marco del centenario. En cuanto a la cultura popular y tradicional, alrededor de 11.000 personas asistieron a los diferentes actos, como el Toque de inicio, la Noche de fuego, el encuentro de gigantes —que este año introdujo un encuentro infantil—, la jornada castellera y el baile de sardanas.
Las actividades para familias han aportado una gran variedad de actos que han llegado a todos los distritos. Como novedad, la plaza de la Carpa fue el escenario para Payasos sin Fronteras que, por primera vez en las fiestas, presentaron el trabajo que les lleva a correr el mundo como artistas voluntarios de las artes escénicas.
Además, el parque de Les Planes se convirtió en el epicentro de la ciencia, alrededor de 600 personas participaron en una mañana rellena de talleres de divulgación científica. Cerca de 1.000 asistentes para disfrutar de los espectáculos en el Jardín de las Tortugas situado en la plaza de Maria Artigal. Y, finalmente, el parque de Bellvitge fue el Parque de las Meravelles, que atrajo a 2.800 espectadores en un surtido abanico de espectáculos de calle.