El Ayuntamiento de Barcelona ha iniciado hoy la retirada de siete paradas de floristas en desuso situadas en el tramo central de la Rambla, dentro del proyecto de reurbanización que se espera finalizar en 2027. Esta intervención forma parte de un proceso más amplio para transformar este emblemático paseo en un espacio más verde, amable y destinado al peatón. “Queremos que este espacio vuelva a ser el centro de Barcelona. La rambla debe ser el paseo de los barceloneses y un espacio de ocio y comercio”, ha comunicado el comisionado del Pacto por Ciutat Vella, Ivan Pera.
Las paradas en desuso
Las paradas que se retirarán están situadas entre la Rambla 100 y 114, en el lado Besòs, y delante de los números 79 y 87, en el lado Llobregat. La mayoría de estos establecimientos habían cerrado tras la renuncia de los titulares o por amortizaciones acordadas en los últimos años. Los trabajos para desmantelarlas consistirán en el corte de las puertas de acceso y la retirada de las estructuras con maquinaria de pequeñas dimensiones. La operación debe finalizar antes del 8 de noviembre y está supervisada por Bomberos de Barcelona y Protección Civil para garantizar el acceso de emergencias a la zona.
Continuidad de las paradas activas
Un total de ocho paradas de floristas continúan operando en La Rambla. Estas paradas se consideran un activo importante tanto para la Rambla como para el Mercado de la Boquería. El Ayuntamiento ha informado de que, cuando la reforma necesite ocupar la parte central donde se encuentran actualmente, se les proporcionará una ubicación provisional en la plaza de Cataluña. Una vez finalizadas las obras, estas paradas volverán a su ubicación original . “Està previst que a l’últim trimestre del 2025 es desplaçaran aquestes parades actives. En aquell moment serà quan abordarem el tram central” , explica Pera.
El proyecto de reurbanización de la Rambla
El proyecto de la nueva Rambla pretende reducir el espacio destinado a los vehículos para dar más lugar a los peatones, con una sección rodada continua y limitada a un carril por sentido. Además, se ampliarán las aceras laterales para facilitar el paseo, mientras que el tramo central crecerá ligeramente para mejorar las condiciones de vida de los árboles y el espacio disponible para las personas.
Inversión y seguimiento de las obras
El presupuesto total para la transformación de la Rambla es de 55,6 millones de euros, de los que 48 millones ya se habrán invertido en este mandato. Las obras, que afectan a cinco tramos del paseo, han sido diseñadas para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos y mantener el equilibrio entre espacio público y usos comerciales.
Para mantener la ciudadanía informada y minimizar las molestias durante la reforma, el Espacio Rambla, situado en el Palacio de la Virreina, ofrece información en formato virtual y presencial. Además, se ha habilitado un sitio web y un canal de Telegram para ofrecer actualizaciones sobre el avance de las obras. “Todos los barceloneses tendrán acceso total para conocer la evolución de las obras”, reconoce el comisionado del Pacto por Ciutat Vella.