Los Mossos d’Esquadra han inspeccionado este mes de abril 105 locales en Barcelona en una operación para combatir la venta de productos robados que ha acabado con la intervención de unos 100 teléfonos de alta gama nuevos de los que no se podía acreditar la procedencia, 5 móviles más procedentes de hurtos y varias joyas que se están analizando.
Los agentes realizaron inspecciones administrativas a 52 locales de compraventa de oro y a 53 locales de compraventa de productos de segunda mano y de reparación de objetos. El objetivo de la operación era impedir la introducción en el mercado de productos procedentes de actividades delictivas y devolverlos a los legítimos propietarios, así como combatir la receptación, es decir, que nadie se beneficie de la venta de productos robados.
Las inspecciones es hicieron en dos fechas diferentes, los días 9 y 18 de abril. El primer día las operaciones se centraron en los locales de compraventa de oro, con inspecciones por la mañana y por la tarde en los diez distritos de la ciudad.
Como resultado, 10 locales fueron denunciados y se intervino una pulsera que había sido vendida por una persona multirreincidente. También se inmovilizaron y fotografiaron varias joyas más para analizarlas y saber su procedencia y posible vinculación con actividades criminales.
El día 18 de abril las inspecciones se centraron en locales de compraventa y reparación de artículos usados, también en operaciones por la mañana y la tarde en todos los distritos.
Como resultado, se denunciaron 7 establecimientos por incumplimiento de la normativa de Consumo y 13 por falta de registros obligatorios y por omisiones del deber de comunicación.
En estas inspecciones, en el distrito de Ciutat Vella se intervino 5 teléfonos móviles procedentes de hurtos y 100 más de alta gama nuevos de los que el establecimiento no pudo acreditar su procedencia. En Nou Barris se localizó un móvil que había sido denunciado como sustraído.
Aparte de la actividad inspectora de los agentes de Mossos d’Esquadra, en las intervenciones del día 18 de abril también había presencia de inspectores de trabajo que denunciaron siete infracciones leves por falta de registro de jornada laboral y 13 graves por falta de contrato o por irregularidades.
Los Mossos consideran estas inspecciones muy importantes para luchar contra la multi reincidencia, ya que se actúa contra los canales de venta de los productos obtenidos en robos con fuerza o violentos, o en hurtos.