.gif)
El Ayuntamiento de Barcelona estudia medidas después de que Airbnb no haya descolgado 800 anuncios de pisos turísticos ilegales del primer trimestre de este año. La teniente de alcaldía Laia Bonet ha lamentado que la plataforma ya no atienda sus peticiones de retirar los anuncios como hacía hasta ahora y le acusa de ser “cómplice” de una actividad ilegal en la ciudad. En este sentido, Bonet también ha aprovechado para hacer un llamamiento a todas las instituciones con las que el consistorio pueda actuar para parar los pies a toda esta actividad que busca “evitar y contradecir” la normativa. “Cada piso turístico ilegal afecta doblemente al derecho de acceso a la vivienda, necesitamos disponer de la máxima cantidad de herramientas para combatir esta situación”, ha subrayado.
Ahora, sin embargo, la teniente denuncia un cambio de estrategia por parte de esta plataforma, la cual “no atiende” ni siquiera la acción de descolgar los anuncios. “No se trata solo del incumplimiento de la dinámica de colaboración que habíamos tenido hasta ahora, sino que la hace cómplice de una actividad que genera molestias y que afecta a un derecho básico, el de la vivienda”, ha señalado.
Si bien el Ayuntamiento trabaja con el 2028 en el horizonte, de la mano de la decisión de no renovar las licencias de los pisos turísticos ilegales existentes, Bonet también cree que se va a poder hacer cosas ahora. “Por eso lanzamos este grito de denuncia pública”, ha concluido, “junto con un mensaje de que seremos inflexibles ante el incumplimiento de la normativa”.
“Evidentemente, detrás de estos anuncios hay personas individuales, pero también organizaciones mafiosas y, por tanto, estructuras que buscan incumplir la normativa de vivienda en nuestra ciudad”, ha añadido la teniente.
