miércoles, 23 de abril de 2025
És notícia

El agua regenerada en la planta del Llobregat desde 2022 equivale a la producida en un año en la desalinizadora de El Prat

Foto del avatar

El agua regenerada en la depuradora del Llobregat para usos prepotables desde diciembre de 2022 y hasta principios de este año equivale a la producción de un año en la desalinizadora de El Prat, que dispone de una capacidad máxima de 60 hectómetros cúbicos. En un comunicado, la Agencia Catalana del Agua (ACA) ha detallado que en este periodo se proporcionaron 61,8 hectómetros cúbicos. Este recurso hizo aumentar la disponibilidad de agua en la región de Barcelona y evitó la entrada en la fase de emergencia 2 en el sistema Ter Llobregat el año pasado. Esto, según la ACA, habría provocado “una intensificación de las limitaciones” para usos urbanos, ya que las reservas, sin el agua regenerada, hubieran alcanzado los 49 hectómetros cúbicos.

Esta medida se llevó a cabo en el río Llobregat, a la altura del azud en el límite entre Molins de Rei y Sant Vicenç dels Horts, para mezclarse con el caudal que lleva de forma natural. Posteriormente, se potabilizaba ocho kilómetros abajo, en la instalación de Sant Joan Despí.

El máximo aprovechamiento de este recurso llegó durante el invierno de 2024, cuando se devolvieron de manera sostenida 1,5 metros cúbicos por segundo al río Llobregat. Por esta época, la desalinizadora del Llobregat, que funcionaba al máximo de su capacidad, aportaba al sistema Ter Llobregat dos metros cúbicos por segundo, cuando la demanda en este ámbito en aquel momento era de 10 metros cúbicos por segundo. La ACA ha subrayado que en estos más de dos años de agua regenerada se ha hecho “un seguimiento continuado y riguroso” de la calidad.

El levantamiento de las restricciones, anunciado a principios de mes por la consellera Silvia Paneque, y con el cambio a fase de prealerta se dejará de aportar agua regenerada para usos prepotables. Sin embargo, se seguirá haciendo en el tramo final del río Llobregat, en la potabilizadora de Sant Joan Despí, para garantizar el caudal ecológico y evitar una mayor liberación de agua desde la presa de La Baells.

Paneque también ha concretado que estas medidas “han venido para quedarse” para dejar de “depender de la pluviometría”. En este sentido, la titular de Territorio, Vivienda y Transición Ecológica ha explicado que estos días “se están haciendo las pruebas en el río Muga, donde se está replicando el mismo modelo que en el Llobregat” de cara a si vuelve haber “un episodio grave de sequía”.

Total
0
Shares
Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Noticia anterior

Juntos reclama ayudas urgentes para el campesinado afectado por la granizada

Siguiente noticia

Ordino mantiene la tradición de las carabelas a pesar de la falta de relevo generacional

Noticias relacionadas