Barcelona registra un 5,1% menos de hurtos y un 8% menos de robos con violencia.
Así se desprende del balance de los datos de seguridad en Barcelona en el primer semestre de 2024 en comparación al mismo periodo el año pasado.
También destaca que las detenciones han aumentado un 9,1% y los delitos contra la salud pública se han disparado un 10,3% (de 887 a 978) por el incremento de la actividad policial destinada a la lucha contra el tráfico de sustancias estupefacientes.
Según los datos, la situación de los narcopisos se encuentra “en fase de control” y actualmente solo constan ocho puntos de venta activos, todos en el distrito de Ciutat Vella.
La cifra se considera “residual”, ya que desde 2017 hasta ahora se han desarticulado más de 340.
Todo ello se ha abordado este jueves durante la reunión de la Junta Local de Seguridad de Barcelona.
La junta, presidida por el alcalde Jaume Collboni, ha contado con la presencia del consejero de Interior, Joan Ignasi Elena, y con la participación de los cuerpos policiales y representantes de la Judicatura y la Fiscalía.
Además de analizar la evolución de los datos de los últimos meses, también han hablado de la Copa América de Vela, ya que el dispositivo contará con el refuerzo de 400 nuevos efectivos que comenzarán la fase de prácticas una vez habrán finalizado el curso de formación básica en el Instituto de Seguridad Pública de Cataluña.
Bajan hurtos y robos
El número global de delitos en la ciudad ha disminuido un 0,5% en los primeros seis meses de 2024 respecto al mismo periodo de 2023, revirtiendo así el aumento del 8,6% de los delitos que sufrió Barcelona en 2023 con relación a 2022.
Según Interior y el Ayuntamiento, es el resultado de la combinación de inteligencia policial y aumento del número de dispositivos.
El teniente de alcaldía de Seguridad del Ayuntamiento de Barcelona, Albert Batlle, ha señalado que los datos permiten “cierto optimismo” y un horizonte “de esperanza” y ha destacado la acción policial y la lucha contra la delincuencia.
Con todo, ha admitido que hay una delincuencia “enquistada” en los delitos llamados ‘de baja intensidad’.
Según el director general de los Mossos d’Esquadra, Pere Ferrer, la seguridad en Barcelona ha mejorado gracias al aumento de la actividad policial.
“El trabajo intenso empieza a dar frutos”, ha dicho satisfecho por la leve reducción global y especialmente por la disminución de los hurtos, el delito con más incidencia en la capital catalana.
Durante el año 2024, los hurtos han disminuido un 5,1% con relación al primer semestre de 2023 (de 50.091 a 47.521).
Representan seis de cada diez delitos que se producen en Barcelona.
El 40,3% se producen en la vía pública, el 30,8% en los establecimientos comerciales y el 24,4% tienen lugar en el transporte.
En cuanto a los robos con violencia y/o intimidación se reducen un 7,7%.
De hecho, este año se han registrado en total 522 menos que el mismo periodo de 2023, pasando de 5.473 a 5.035 hechos.
Este primer semestre se han realizado 1.579 detenciones en este ámbito, lo que representa un incremento del 8,1% respecto al mismo periodo de 2023.
En la mayoría de los casos los robos con violencia en la vía pública están cometidos por un único autor o dos autores, sin uso de armas ni objetos (87%), donde se sustrae sin cometer ningún tipo de lesión a la víctima (70,3%).
En la mitad de los casos el objeto sustraído es el móvil, seguido de las bolsas de mano (22,6%), las joyas (9,1%) y el reloj (8%).
La bajada también es evidente en los robos con fuerza que disminuyen en global un 3%.
Hay un claro descenso de los robos con fuerza en empresas (-26,5%).
También se ha reducido un 4,5% los robos en domicilios y un 4,3% los robos en el interior de vehículos.
Más de 250 reincidentes
El aumento de la actividad policial se traduce también en un incremento de las detenciones.
En el primer semestre del año se han detenido a 14.192 personas, un 9,1% más que el mismo periodo 2023.
En cuanto a los investigados, crecen un 12,3% hasta llegar a las 30.551 personas investigadas.
Se han detectado 265 multirreincidentes, a los que se les ha imputado un total de 4.676 hechos, principalmente hurtos y robos violentos en la vía pública. Los cinco delincuentes más activos en la ciudad acumulan un total de 274 antecedentes.
La policía habla de “multindetenidos” para destacar que el trabajo policial de detenerlos se efectúa. Otra cosa es que la legislación y los recursos son “insuficientes”.
Así lo ha dicho Batlle, que ha señalado que en la Junta Local de Seguridad es algo que se ha compartido también por parte de la judicatura, ya que hay “tapones”.
Así, a pesar del aumento de la presencia policial y una “mejor coordinación” entre operadores todavía hay cosas que “escapan”.
Según Batlle, esta sensación “de impunidad” puede explicar también el hecho de que la inseguridad sigue siendo el problema más grave según la percepción de la ciudadanía, tal y como refleja el Barómetro Municipal presentado esta semana por el consistorio.
Sobre la multirreincidencia, Ferrer ha hecho valer el Plan Tremall y se ha mostrado convencido de que la reducción de los hurtos o los robos con violencia quieren decir que se está empezando a revertir la situación.
Los narcopisos, reducidos “al mínimo”
En Barcelona los delitos contra la salud pública han experimentado un aumento del 10,3 %, pasando de 887 hechos en el primer semestre de 2023 a 978 el mismo periodo de 2024.
Según Ferrer, esta tipología delictiva se incrementa fruto de la actividad policial y “más presión” en este ámbito.
Es decir, que la presión policial ejercida sobre los puntos donde se venden sustancias estupefacientes o donde se cultiva marihuana ha hecho aflorar esta actividad y ha permitido luchar con un importante número de investigaciones realizadas durante todo el año.
La actividad policial ha permitido desmantelar 84 puntos de venta y se han intervenido sustancias estupefacientes de diversos tipos como cocaína, heroína, crack, hachís y plantaciones de marihuana (2.276 plantas).
La actuación policial ha reducido “al mínimo” los narcopisos y la mayoría de los puntos desarticulados han podido ser recuperados y entregados a su legítima propiedad o tapiados. Actualmente, hay una octava de puntos de venta, todos en el Distrito de Ciutat Vella.
Desde 2017 y hasta ahora, se han desarticulado más de 340.
Denuncias por venta ambulante e incivismo
Durante los primeros 6 meses del año la Guardia Urbana ha gestionado 278.471 incidentes, de los que 21.015 han estado relacionados con el incivismo.
En el marco de la ordenanza de civismo se han interpuesto 46.374 denuncias durante el primer semestre del año, de las que más de 23.200 han sido por venta ambulante no autorizada, sobre todo relacionada con la venta de bebidas y alimentos en el espacio público, y más de 20.000 por consumo de alcohol en la calle.
Aumenta un 10,4% la violencia doméstica
Durante el primer semestre de 2024 disminuyen un 2,5% las denuncias por agresiones sexuales (de 530 a 517).
Según los datos policiales, buena parte de los hechos que se denuncian en el ámbito de las violencias sexuales se producen en un entorno cercano, que en muchas ocasiones la víctima considera seguro, por parte de autores conocidos ya sea en el ámbito de la pareja, expareja, familiar o el entorno de la víctima o de su círculo.
Por el contrario, las violencias de género y doméstica se incrementan.
En concreto la violencia de género aumenta un 5% y la violencia doméstica un 10,4%.
Desde la puesta en marcha del SAV en el primer trimestre de 2023, los puntos de atención integral a mujeres víctimas de violencia machista y a sus hijos han atendido a casi mil mujeres de las cuales 614 interpusieron denuncia penal y 337 recibieron asesoramiento.
De las 614 denuncias interpuestas en el ámbito de la violencia de género, el tipo de violencia más habitual son los malos tratos en el ámbito del hogar con un 45% de hechos denunciados, seguidamente de las amenazas y coacciones.
Ferrer ha dicho que la reducción de las denuncias por agresiones sexuales “no es casual” y lo ha vinculado a la labor preventiva y de patrullaje de la policía, que ha aumentado en un 100% las horas de patrullaje.
Resultados “modestos”, ha reconocido, pero que indican que se va por el buen camino.
Por el contrario, ha admitido que hay delitos que no mejoran, como las amenazas o malos tratos en el ámbito del hogar.