La Asociación ‘El Defensor del Paciente’ ha interpuesto una denuncia contra el Servicio Extremeño de Salud tras la trágica muerte de un bebé de tres meses, que murió a causa de una demora en su atención médica. El caso se remonta al 14 de marzo de 2024, cuando la familia del bebé, acusa al SES de negligencia en la gestión de la emergencia que puso fin a la vida del bebé.
El incidente ocurrió cuando la abuela del niño alertó al servicio de emergencias 112 sobre una avería en la máquina de ayuda respiratoria del bebé. Pese a la urgencia de la situación, los primeros sanitarios que atendieron el caso indicaron que fueran los familiares quienes trasladaran al bebé al hospital. Posteriormente, decidieron enviar una pediatra al Centro de Salud, pero ésta nunca llegó. En su lugar, una ambulancia que no contaba con oxígeno ni personal especializado llegó tras una hora de espera.
El menor fue finalmente trasladado al Hospital Tierra de Barros, que no dispone de una Unidad de Cuidados Intensivos Pediátricos. Ante la gravedad del estado del bebé, los médicos solicitaron su derivación urgente al Hospital Materno Infantil de Badajoz, pidiendo un helicóptero medicalizado, que nunca llegó, al igual que la UVI móvil terrestre. Después de tres horas de angustiante espera, el bebé murió.
Carmen Flores, presidenta de ‘El Defensor del Paciente’, ha denunciado que la situación de la atención sanitaria en Extremadura “supera ampliamente lo que es tolerable”. Ante lo que sucedió, la familia exige justicia y ha solicitado que se reconozca la responsabilidad patrimonial del SES, reclamando una indemnización de 226.958,74 euros por los daños ocasionados.