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El diputado de Junts Josep Rull ha sido elegido presidente del Parlament en segunda votación tras recibir los votos de su partido, de ERC y la CUP. En total, 59 votos a favor por delante de los 42 que ha recibido la diputada del PSC Sílvia Paneque. Así pues, la mesa de edad ha contabilizado el voto de los diputados de Junts Carles Puigdemont y Lluís Puig aunque el Tribunal Constitucional (TC) haya tumbado el voto delegado y el voto telemático que Puig ejercía en la anterior legislatura. Por su parte, los comunes han votado en blanco y, de esta manera, no se han decantado por ninguna de las dos opciones. De esta manera, han cerrado la puerta a la posibilidad de que el PPC diera sus votos a la candidata socialista.
Las votaciones se han hecho mediante papeletas que los diputados han depositado en una urna. Y el diputado de Junts Albert Batet ha sido el encargado de introducir en la urna las papeletas de parte de Puigdemont y de Puig. Tanto el PPC como Vox han anunciado que presentarán un recurso de amparo al TC contra la decisión de aceptar la delegación de voto de los dos diputados de Junts exiliados.
En la primera ronda de votaciones, ninguno de los candidatos a la presidencia del Parlamento ha obtenido la mayoría absoluta necesaria de los 68 votos. Rull ha recibido los 35 de Junts; Panque los 42 del PSC; ERC y la CUP han votado en blanco; los 15 diputados del PPC han votado por su diputado Pere Lluís Huguet; los 11 diputados de Vox han apostado su diputada María Elisa García Fuster; y los 6 diputados de los comunes han votado a su diputada Susanna Segovia. Los dos diputados de Alianza Catalana han hecho voto nulo.
Los republicanos han votado en blanco en la primera vuelta, según fuentes del partido, para evitar sumas en la segunda votación que intentasen evitar la presidencia de Rull, tal y como habían pactado con Junts.
En cambio, en la segunda ronda de votaciones los diputados sólo han podido escoger entre los dos candidatos más votados en la primera: Josep Rull y Sílvia Paneque. 32 diputados han votado en blanco y los dos de Alianza Catalana han vuelto a emitir voto nulo.
Una de las principales funciones del presidente del Parlamento y la primera tarea relevante que tendrá Rull será proponer un candidato a la presidencia de la Generalidad después de hacer una ronda de consultas con los grupos. Así pues, será el encargado de decidir si Carles Puigdemont (Junts) o Salvador Illa (PSC) se someten a una investidura, que se sitúa en el calendario justo para después de Sant Joan.
Expreso del 1-O y hombre de consenso dentro del independentismo
Tiene 55 años y nació en Terrassa, donde ejerció de concejal durante más de 10 años. Toda su carrera política ha estado ligada a Convergència Democràtica de Catalunya, partido del que fue coordinador general hasta 2016. Después formó parte del partido sucesor, el PDeCAT, y desde 2020 está en las filas de Junts.
Con sólo 18 años se afilió a la Juventud Nacionalista de Cataluña (JNC) en Terrassa, y fue secretario general de esta organización entre los años 1994 y 1998.
Rull se conoce muy bien el Parlament, ha sido diputado más de 20 años. Llegó a la cámara catalana en 1997 y ocupó uno de los escaños del hemiciclo hasta 2019, año que renunció para presentarse a las elecciones españolas están en prisión. A lo largo de su larga trayectoria en la cámara catalana también ha sido miembros de la Mesa, en 2010 fue elegido secretario tercero.
Ahora después de las elecciones del 12-M, Rull vuelve al Parlamento y lo hace para ocupar la presidencia. En las últimas elecciones, ha sido el número 3 de la lista de Junts encabezada por Puigdemont.
Rull ejerció de consejero de Territorio y Sostenibilidad con el gobierno de Carles Puigdemont y fue condenado por el 1-0 a 10 años y medio de prisión y de inhabilitación por un delito de sedición. En 2021, después de más de 3 años en prisión, fue indultado por el gobierno español de Pedro Sánchez. Está considerado un perfil conciliador dentro del independentismo.
