Un estudio de la Universidad Pompeu Fabra (UPF) y la Universitat Oberta de Catalunya (UOC) revela que las chicas que utilizan Instagram y TikTok valoran “más negativamente” que los chicos el impacto de estas redes sobre su bienestar psicológico.
Se trata del primer estudio cuantitativo sobre la percepción de los adolescentes españoles de estas redes en diversas facetas de su vida social. Entre las posibles causas, la investigación señala que las chicas hacen un uso más intensivo de las redes y que se sienten más observadas y presionadas por la imagen y aspecto físico que proyectan, además de necesitar más validación externa.
Uno de los resultados de la encuesta indica que los jóvenes usuarios de TikTok valoran especialmente que las interacciones con otros usuarios a través de esta red social les facilita la comprensión y aceptación de las normas y convenciones sociales.
Pero el estudio alerta de que esta tendencia “resta capacidad crítica” a los adolescentes por ejemplo en cuanto a los roles de género. Así, las autoras del estudio, Mónika Jiménez (UPF) y Mireia Montaña (UOC), alertan del “sesgo de género” de parte de los contenidos de TikTok y de los efectos “importantes” que esta circunstancia tiene sobre los adolescentes.
Por ejemplo, Jiménez apunta que los contenidos sobre moda y belleza que el algoritmo de TikTok suele ofrecer “por defecto a las chicas”, tienen una incidencia “clara” sobre su imagen corporal o la autoestima.
En el caso de los chicos, el hecho de que los contenidos sugeridos estén “muy relacionados con deportes y juegos de competición, con conductas a menudo agresivas, reafirman la idea del hombre dominante vinculado a la masculinidad tóxica, con pocos espacios para mostrar sus emociones”.
Montaña añade que las adolescentes tienen una percepción “más crítica y a menudo más negativa” del impacto de las redes sociales en su bienestar, “posiblemente porque se exponen más intensamente y sienten más presión por la apariencia y la validación externa”. Esto “apunta” a una “necesidad urgente” de reforzar su “educación emocional y mirada crítica en las redes“.
Más de mil encuestados
El estudio parte de una encuesta a una muestra representativa de 1.043 adolescentes españoles de 12 a 18 años (el 50,5% chicas y el 49,5% chicos), de los que el 70,7% son usuarios de TikTok y el 63,8% de Instagram.
Los encuestados han valorado del 1 al 5 el impacto de las redes sobre 9 ítems de su vida social (de más negativo a más positivo). Los ítems con una valoración más baja tanto entre los chicos como entre las chicas son el bienestar psicológico y la comunicación con las personas adultas más cercanas (3,06 en ambos casos). En el caso del bienestar psicológico, las mujeres puntúan esta dimensión con un 2,99, frente al 3,13 de los chicos.
Los ítems mejor puntuados son la capacidad de organización colectiva (con un 3,52), la pertenencia grupal (3,51) y la posibilidad de expresarse tal y como son (3,48). En todas las dimensiones del estudio, excepto el bienestar psicológico, no hay diferencias relevantes por género.
El resto de dimensiones valoradas son la habilidad para argumentar y debatir, la socialización entre iguales, la aceptación de las normas establecidas y la toma de decisiones y autonomía social.
Efectos “contrarrestados”, impacto “neutro”
En términos generales, el estudio indica que los jóvenes consideran que los efectos negativos del uso de estas redes se ven “contrarrestados” por los positivos, de tal manera que el impacto es “neutro”. Por ello, las puntuaciones de todas las dimensiones se sitúan por encima del ecuador del 2,5.
Los jóvenes indican, incluso, ciertos efectos positivos del uso de las redes sobre su bienestar psicológico. Por ejemplo valoran que les faciliten conexión, apoyo y espacios de debate con personas en situaciones similares.
Otra de las conclusiones del estudio es que los jóvenes perciben de forma “más positiva” el impacto de estas dos redes sobre su vida social cuando son usuarios que cuando no lo son. Entre los usuarios de Instagram, la capacidad de organización colectiva, y la pertenencia grupal, son las dimensiones mejor valoradas con un 3,55.
Consumidores activos
Por otro lado, el estudio muestra que los adolescentes tienen una percepción “bastante cuidadosa” de los efectos que las redes tienen en su vida social y emocional, aunque, en opinión de Montaña, “todavía hay margen para trabajar en su capacidad crítica, especialmente en lo que se refiere al algoritmo de TikTok”.
En la misma línea, Jiménez concluye que por ahora no hay estudios que determinen “hasta qué punto los adolescentes tienen herramientas para captar y afrontar las consecuencias de la dictadura algorítmica”, por lo que “hay que analizar cuál es su capacidad real para hacerlo y, a partir de ahí, decidir las herramientas que necesitan”.