Recientemente, se ha estimado que más de 700.000 personas viven en zonas inundables en Cataluña, y un 15% de las áreas urbanizadas están en riesgo de inundación. Por ello, la organización Ecologistas en Acción ha exigido a la Generalitat de Cataluña la aprobación inmediata de una moratoria en toda la planificación urbanística que implique riesgos de inundabilidad.
Esta demanda llega en un momento en que los efectos del cambio climático se hacen cada vez más evidentes, y la organización critica la gestión de los últimos años que ha priorizado la “urbanización especuladora” sin considerar los riesgos naturales. A su vez, los recientes hechos ocurridos en el País Valenciano, hacen saltar todas las alarmas a que alguna situación parecida pueda pasar en Cataluña “si no se actúa ya”, afirman desde la organización.
Ecologistas en Acción señala que la regulación de los límites de edificabilidad en zonas inundables se estableció en un contexto en el que no se hablaba del cambio climático, y denuncian que durante años se ha fomentado la urbanización especulativa sin tener en cuenta los flujos naturales. Además, han señalado que actualmente hay proyectos aprobados que presentan serios riesgos de inundación, lo que debería hacer repensar las políticas urbanísticas del gobierno. La organización reclama que se actualicen tanto la evaluación preliminar del riesgo de inundación como los mapas de peligrosidad y riesgo, así como la normativa urbanística relacionada con la planificación territorial y urbanística en estas áreas vulnerables.
Además, los ecologistas han expresado su desconfianza hacia la Agencia Catalana del Agua (ACA) y han propuesto la creación de un consejo de expertos independientes, desvinculado de intereses políticos o privados, para asegurar que los informes sobre planes y proyectos urbanísticos sean objetivos e imparciales.
La organización también ha aprovechado para criticar al actual Gobierno por su falta de coherencia con el discurso de emergencia climática. “Desde hace años denunciamos planes urbanísticos que presentan problemas de inundabilidad y la inacción política ante los efectos del cambio climático”, han afirmado.
Ecologistas en Acción ha recordado que en los devastadores aguaceros recientes en el País Valenciano, se han registrado más de 500 litros por metro cuadrado, y ha alertado sobre los riesgos que episodios similares podrían representar para el área metropolitana de Barcelona, en particular el Delta del Llobregat.
Reevaluar el modelo de crecimiento
La organización hace un llamamiento urgente a repensar el modelo de crecimiento urbanístico, que actualmente ha llevado a cubrir un 60% del territorio de cemento y a incrementar la vulnerabilidad ante episodios climáticos extremos. En este sentido, el Plan Director Urbanístico Metropolitano, que prevé decenas de miles de nuevas viviendas en zonas inundables, es uno de los objetivos principales de su crítica.
La experiencia del temporal Gloria, que en enero de 2020 provocó inundaciones significativas en la costa central, demuestra que “la falta de acción política puede tener consecuencias devastadoras”, afirman. Ecologistas en Acción recuerda que el informe del Institut d’Estudis Catalans concluyó que el modelo de crecimiento actual ha aumentado nuestra exposición a los episodios extremos.
Para hacer frente a esta situación, la organización ha formulado una serie de demandas:
1. Moratoria inmediata sobre todos los proyectos urbanísticos en el Delta del Llobregat y otras zonas vulnerables.
2. Paro en la tramitación del Plan Director Urbanístico Metropolitano para descalificar urbanísticamente construcciones en zonas inundables.
3. Reevaluación de los mapas de inundabilidad por parte de la ACA a la luz del nuevo panorama climático.
4. Estudio exhaustivo de las infraestructuras vulnerables y un programa de construcción o protección.
Ecologistas en Acción concluye que es esencial implementar actuaciones y políticas valientes que prioricen la vida y minimicen tanto las causas como las consecuencias de los episodios climáticos extremos. La organización hace un llamamiento a las administraciones para que actúen de manera decidida antes de que sea demasiado tarde.