Los conductores de vehículos Hyundai deben mantenerse alerta después de que las autoridades europeas hayan emitido un aviso de seguridad sobre ciertos modelos de la marca coreana, que podrían estar expuestos a un riesgo de incendio. Esta alerta afecta a varios modelos vendidos entre 2007 y 2014, algunos de los cuales son muy habituales en las carreteras españolas.
El problema detectado está relacionado con una fuga interna del líquido de frenos, la cual puede provocar un cortocircuito en el sistema electrónico que gestiona los sistemas de seguridad ABS/ESC, tal y como ha informado Nación Digital. Este mal funcionamiento puede generar un sobrecalentamiento en la caja de fusibles, aumentando el riesgo de incendio en el vehículo.
Según la información difundida por la Comisión Europea y confirmada por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), los modelos afectados son el Hyundai Santa Fe, H1 y IX55, así como el Hyundai Accent, Tucson, Genesis y IX35. Estas fugas podrían afectar hasta 50.000 vehículos en España si el defecto se detectara en todos los modelos vendidos entre 2007 y 2014, aunque actualmente se desconoce el alcance exacto del problema.
Este defecto, que se identificó a través del sistema de alertas europeo RAPEX, no afecta a todos los vehículos de estos modelos, pero es crucial que los propietarios revisen si sus coches son susceptibles al problema. En caso de duda, la mejor opción es ponerse en contacto con el fabricante o con un concesionario oficial para determinar si el vehículo está incluido en la lista de afectados. Hyundai ha confirmado que se hará cargo de la reparación de manera gratuita para garantizar la seguridad de los conductores.