-Respeto a la concejalía de Promoción y Dinamización económica y empresarial, ahora tenéis en marcha el Gastrotour, ¿con qué afluencia esperáis acabar?
Gastrotour tiene mucho éxito y este año contamos con más restaurantes participantes, en total 64. Así que la cifra es muy buena y nos demuestra que Gastrotour es una ruta ya consolidada en el municipio de Salou. Además, hay que reconocer que las tapas están realmente trabajadas y que los establecimientos dan lo máximo para presentar una buena degustación. Este año la afluencia acabará siendo muy buena porque la ruta está abierta para todo el mundo; el turista, los salouenses y la gente del territorio participan. Al final, el público es muy variado, por eso también, nuestro programa de la ruta está en un total de 4 idiomas.
-¿En qué destacaría el Gastrotour de las otras rutas gastronómicas de la ciudad?
Principalmente, que los restauradores no se mueven de su cocina y entonces es mucho más fácil trabajar porque no se tienen que desplazar. Además, al ser una degustación de pequeños platos, tiene un precio muy asequible de 2,5 euros tapa con cerveza San Miguel y, personalmente, considero que es un coste que puede llegar prácticamente a todo el mundo. También destaca que los niños tienen su propia tapa, que es diferente a la de los padres, y esto ayuda a que la ruta esté enfocada mucho más en el término de familia.
-Estáis llevando a cabo muchas ferias gastronómicas, ¿apostáis por este tipo de turismo en el municipio?
Para el turismo, la gastronomia local es una experiencia que deben vivir. El turista, sobretodo, viene a pasar sus vacaciones a Salou y busca disfrutar del sol, la playa y también de la gastronomía. En nuestra marca Salou Food Experience hacemos el Gastrotour, en octubre realizamos el Rally de Tapes y en noviembre o diciembre en Salou se celebra la Festa del calamar y nosotros también la celebramos con un menú con calamar en el que hacemos participar a todos los restaurantes que quieran. La desventaja que tenemos en estas fiestas después del Gastrotour es que son en meses donde, después de una temporada larga, muchos locales cierran sus puertas; así que el número de participantes no es tan alto como en el Gastrotour.
Respecto a esto, desde la regidoría de Comercio estamos intentando buscar nuevas maneras para involucrar la restauración en el máximo número de oportunidades que podamos con el objetivo de desestacionalizar la temporada. Por ejemplo, para este próximo año 2019, estamos mirando de involucrar a los establecimientos en el Cós Blanc porque es una fiesta que atrae a un gran número de personas que vienen a la ciudad.
-¿Qué otros actos estáis preparando para cuando el Gastrotour acabe?
Pues justamente aprovechando la finalización de la ruta de tapas, este año llevamos a cabo el Shopping Salou pero con un nuevo enfoque. Hasta ahora, siempre lo habíamos hecho a finales de junio o principios de julio, que era cuando empezaban las rebajas; y siempre con realizando una pasarela de moda. Este año, la feria cambia a los días 1,2 y 3 de junio en el Passeig Jaume I pero no hay pasarela, sino que cada comercio tendrá una carpa propia con tarima en la que se llevará a cabo la presentación de las nuevas tendencias en moda y en complementos de verano 2018. Además, la edición contará con música en vivo y con 3 asesores de imagen para aconsejar a los clientes sobre la ropa y los complementos que más se adaptan a ellos. Este año, tenemos cerca de 30 comercios participantes y esperamos que el nuevo formato guste y que tenga éxito.
-Respecto a la concejalía de Comercio, consumo y mercados, hace poco presentasteis los dispositivos para detectar los billetes falsos, ¿nos puedes explicar un poco la campaña?
Pues es un proyecto que llevamos a cabo con la Policía Local. Cada año trabajamos en la seguridad del comercio y este año hemos decidido reforzar la campaña de seguridad haciendo los dispositivos de detención de billetes falsos. Entonces, un agente de policía está distribuyendolos y enseñará a los comerciantes como funcionan. El objetivo, a parte de reforzar la seguridad, es acercanos un poco más al comerciante, tanto desde la Policía Local como des del Ayuntamiento.
-Entonces, ¿necesitáis acercaros más a los comercios?
Pues vamos trabajando en tener más relación con los comerciantes, pero Salou es muy turístico y no es lo mismo Salou ahora que Salou hace 20 años. Des del Ayuntamiento trabajamos con una red de comercio abierta durante todo el año, así que trabajamos codo con codo con la Asociación 365 días Salou Vila Comercial y los dos estamos de acuerdo en que tenemos que hacer pasos conjuntamente para dar más fuerza. Además, cabe destacar que Salou, geográficamente, és complicado porque es muy largo, no tiene forma redonda con la que se puede llegar a todos sitios.
También está el tema que Salou tiene diferentes zonas: la turística, la central abierta durante todo el año y la zona poniente en la que cierran algunos comercios, pero no todos. Durante el invierno, toda la zona turística está cerrada pero durante el verano todos los comercios de todas las partes de Salou están abiertos, así que trabajamos de manera diferente depende del período del año. Entonces lo que estamos haciendo es intentar desestacionalizar la temporada y alargarla, así como empezar antes de hora porque lo que comercio quiere es fidelizar a los clientes que tiene fijos en Salou
-¿Tenéis algún servicio municipal de atención al consumidor?
Sí, tenemos la OMIC (Oficina Municipal de Información al Consumidor) en la que recibimos todas las quejas de los vecinos empadronados en Salou y hacemos mediación para solucionar sus problemas. La parte que más críticas recibe es la de telecomunicaciones. El año pasado 2017 hicimos 143 expedientes y 45 mediaciones. Además, en el día internacional del consumidor, que se celebra el 15 de marzo, hacemos la obra de teatro “La Botigueta” para los alumnos de 3º y 4º de primaria. El objetivo del espectaculo es que los niños aprendan sobre el consumo responsable, los productos de proximidad, las fechas de caducidad, etc. La de este año la celebramos la semana pasada y tuvo una gran aceptación con 300 niños.
