Unos 8.500 militantes de ERC están convocados este viernes para decidir sobre la investidura de Salvador Illa tras el preacuerdo alcanzado esta semana con el PSC.
Las bases deberán responder en una consulta telemática —y presencial en algunas sedes— si están de acuerdo en que el grupo parlamentario “vote a favor de la investidura del candidato socialista a cambio de la soberanía fiscal, la promoción y protección de la lengua catalana, la Convención Nacional para la resolución del conflicto político y el resto de medidas acordadas”.
Se podrá votar desde las 10.00 hasta las 19.00, y a las 19.30 se dará a conocer el resultado final en una comparecencia ante los medios por parte de la dirección republicana.
Según explican desde el partido, toda la votación será telemática, también la que se haga a través de las sedes (se facilitará el voto ‘en línea’ a aquellos militantes que lo necesiten).
De esta manera, aseguran que podrán hacer un seguimiento a tiempo real de la participación en la consulta y se podrá saber el resultado final tan pronto como finalice el tiempo de votación. Los votantes podrán votar ‘sí’, ‘no’ o ‘abstención’.
El preacuerdo con el PSC fue avalado por práctica unanimidad de la ejecutiva este lunes, en una larga reunión de casi diez horas en la que acabaron de cerrar “garantías” con los socialistas.
Esa misma noche, Marta Rovira informó del pacto en una macroasamblea telemática con la militancia.
Durante las horas posteriores fueron los máximos dirigentes de ERC, incluyendo a Pere Aragonès y Marta Rovira, quienes se desplazaron a las diferentes asambleas territoriales para informar y debatir los términos del entendimiento.
En caso de que las bases de ERC validen el preacuerdo, Salvador Illa dispondría de los 68 votos necesarios para superar el debate de investidura, previsto a lo largo de la semana que viene.
Contaría con los 42 votos del PSC, los 20 de ERC y los 6 de Comunes, que también han cerrado un pacto con los socialistas esta semana, validado mayoritariamente por su Consejo Nacional.
Habría que ver, sin embargo, qué hace la diputada de las juventudes de ERC, Mar Besses, que se decidirá en un Consejo Nacional extraordinario de Jovent Republicà, que se convocará una vez se sepa el resultado de la consulta a la militancia republicana.
La consulta a las bases llega en un momento complejo para el partido, tras perder 13 escaños en el Parlament, hasta los 20 diputados, y tras el escándalo por los carteles sobre el alzheimer durante la campaña municipal de Ernest Maragall.
Preacuerdo y posicionamientos públicos
El principal punto del preacuerdo entre ERC y el PSC tiene que ver con la financiación, y contempla que la Generalitat pase de forma gradual a gestionar, recaudar, liquidar e inspeccionar todos los impuestos, empezando por la campaña de la renta de 2025.
El pacto también prevé la creación de una consejería de Política Lingüística y de una Convención Nacional para la resolución del conflicto político, formada por representantes de los grupos parlamentarios y presidida por ERC.
Durante las últimas horas, varios dirigentes y cargos electos de ERC se han ido posicionando en el ‘sí’ o en el ‘no’.
La secretaria general, Marta Rovira, ha defendido el pacto afirmando que es un “salto adelante importantísimo”.
El presidente de la Generalitat en funciones y coordinador nacional del partido, Pere Aragonès, también ha defendido que “puede representar el progreso en el autogobierno más grande hasta el momento“.
En cambio, el expresidente de ERC, Oriol Junqueras, ha mostrado “respeto” por el preacuerdo, pero ha mantenido silencio sobre el voto.
De esta manera, buena parte de la ejecutiva de ERC, miembros del Gobierno y alcaldes de los republicanos se han mostrado favorables al entendimiento, pero también han aparecido voces contrarias.
La diputada en el Congreso, Pilar Vallugera, el consejero nacional del partido, Joan Puig, o exdiputados han hecho público su ‘no’ a la consulta.