Este fin de semana Tremp ha celebrado la primera edición de Elektra, fiesta del agua y la luz.
Se trata de un festival que quiere recrear históricamente la llegada de La Canadiense al Pallars y la construcción de las centrales hidroeléctricas que contribuyeron a la industrialización de Cataluña.
La propuesta ha ofrecido a las personas participantes una programación variada que combinaba propuestas lúdicas, charlas y visitas históricas.
En total se han programado 14 eventos que han tenido gran acogida entre el público, quedando muchos de ellos sin entradas disponibles.
La Elektra comenzó el viernes con el espectáculo de luz y danza de la compañía Brodas Bros El ejército de la Luz.
El sábado el programa ofrecía visita guiada por Tremp, visita al Espacio Patrimonial de la Central de Riudarenes, una charla en la bodega El Vinyer sobre el impacto de la filoxera, un monólogo de Carles Alcoy haciendo de inspector de inmigración de la época, la conferencia de Sisco Farràs en el núcleo de Sant Adrià sobre las supervivientes del Titánico y finalmente un animado concierto de acordeones con Ribatónicos.
El domingo llegó el plato fuerte de Elektra, la recreación del Míting La Crida de la mano de Comediants y las compañías de teatro amateur de Tremp con la ayuda del Orfeón.
Más de 500 personas se acercaron para disfrutar de la propuesta teatral que transportaba al Tremp de 1911.
Aparte de este espectáculo, más visitas guiadas, otro monólogo, una charla del geógrafo Arcadi Castilló sobre el paisaje de antes, una charla de Xavier Moret hablando del Dr. Pearson y finalmente como clausura, un concierto de órgano en la Basílica de Mare de Déu de Valldeflors.
La Elektra ha sido recibido con entusiasmo por la ciudadanía temprana y pallaresa, con voluntad de divulgar desde la fiesta y con el objetivo de subir la autoestima a un territorio que merece propuestas culturales de nivel.
