A pesar de las lluvias de las últimas semanas los acuíferos que proveen los pozos de Roda de Berà continúan al límite, con los niveles más bajos de su historia.
Nuestro modelo de uso del agua hace que se genere una demanda muy por encima de la que nos podemos permitir, y de aquella que pueden producir los pozos de agua municipales. Actualmente, de media, los pozos producen 3.688 metros cúbicos diarios, una cifra a la que se puede llegar gracias a la inyección de 600 metros cúbicos diarios de agua del Ebro que hace el Ayuntamiento a través de una interconexión existente con el depósito del Francaset, con los que se abastece el barrio de Berà Mar. “Esta situación se alarga desde que el pozo de Berà Mar dejó de producir agua potable, hace unos meses. Sin esta inyección no podríamos garantizar las demandas de la población de la zona norte del municipio, ya que actualmente la media de consumo diario se sitúa en torno a los 3.500 metros cúbicos. El diferencial es mínimo, por eso es tan necesario que ahorremos hasta la última gota.“, explica el alcalde Pere Virgili, quien se muestra preocupado por la situación.
De acuerdo con el semáforo de la sequía de la Generalitat de Cataluña para definir los cinco escenarios diferentes según las reservas de agua, en Roda de Berà nos encontramos actualmente en situación de alerta, en el color amarillo, en la zona norte. Los barrios costeros, los cuales beben agua del Ebro, estarían en prealerta. “
Sin embargo, las restricciones son las mismas en todo el municipio, por coherencia y solidaridad
“, dice el alcalde.
Dentro de esta alerta por sequía, siguiendo el Plan de Sequía aprobado por la Generalitat de Cataluña para gestionar los episodios de escasez de agua, el Ayuntamiento continúa con las mismas restricciones de agua que el verano pasado, las cuales se prevé que puedan llegar a ser más críticas con el incremento poblacional que se vive durante el verano, cuando las demandas hídricas aumentan.
Es por ello que el Ayuntamiento continúa pidiendo a la ciudadanía un uso mucho más responsable del agua, ahorrando lo máximo posible. Las restricciones de agua en los usos urbanos que hay vigentes son las siguientes:
Se prohíbe el llenado de piscinas privadas. Es decir, las familias que durante el invierno las hayan vaciado no pueden rellenarlas. Sólo se permite el llenado parcial de las piscinas que cuenten con un sistema de recirculación, para reponer las pérdidas de agua por evaporación; y el primer llenado de las piscinas de nueva construcción.
El Ayuntamiento continúa con su decisión y un verano más no instalará las duchas ni los lavapiés en las playas. Por la grave situación de sequía, para alcanzar un ahorro real de agua, y en coherencia con las decisiones tomadas por la Mesa de municipios por un litoral sostenible, formada por los dieciséis municipios costeros entre Sitges y L’Hospitalet de l’Infant. No se puede derrochar ni una gota de agua.
El Ayuntamiento mantiene cerrados todos los riegos de las zonas verdes del municipio.
El riego de los jardines particulares se puede hacer sólo dos días a la semana, como máximo, con el agua mínima indispensable. Debe hacerse en el horario de menor insolación (de 20h a 8h). Se establece una pauta de alternancia, las viviendas con numeración pareja o sin numeración pueden regar los miércoles y los sábados, y las que tengan numeración impar los jueves y los domingos.
Todas las fuentes del municipio, tanto las ornamentales como las de consumo de agua de boca permanecerán cerradas hasta que la situación de sequía mejore.
Se prohibe la limpieza de vehículos en la vía pública. Esta prohibición está también contemplada en la ordenanza de civismo y convivencia ciudadana de Roda de Berà y hacerlo puede conllevar sanciones.
En este caso, el uso del agua queda limitado a la limpieza en establecimientos comerciales dedicados a esta actividad que cuenten con sistemas de recirculación del agua.
Los servicios municipales realizan la limpieza de la vía pública con agua no potable extraída de pozos no potables, como el de la calle Olot.
Se prohíbe a la ciudadanía la limpieza de calles, pavimentos, fachadas o similares utilizando mangueras de agua. La prohibición no incluye la limpieza con palo de fregar, con garganta y esponja. También se prohíbe la utilización de agua para la eliminación de polvo y materia en suspensión en el aire.
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