Un hombre ha aparecido muerto y atado a una boya frente a la playa de Creixell este sábado, 14 de junio. Lo encontraron unos bañistas que alertaron al 112 tras sacarlo, inconsciente, del agua, pero cuando llegaron los servicios de emergencia solo pudieron certificar su muerte.
Según informa el “Diario de Tarragona”, la víctima es un hombre de unos 50 años residente en la provincia de Barcelona que estaba pasando el día con dos personas más en una embarcación. Se dirigían hacia el norte cuando, presuntamente, la víctima comenzó a encontrarse mal.
El hombre habría llegado a un acuerdo con sus acompañantes, que podrían ser familiares, para abandonar la embarcación y tratar de llegar nadando hacia la playa. Para ello, se lanzó a una boya y saltó al mar mientras sus acompañantes se marcharon del lugar.
En algún momento de su trayecto hacia la playa, el hombre murió y fue entonces cuando otros bañistas lo vieron. Según las primeras investigaciones, el cuerpo del hombre no presentaba signos de violencia. La Guardia Civil, que se ha hecho cargo del caso, está a la espera de los resultados de la autopsia para determinar cuál fue la causa de su muerte.
Preguntados por las circunstancias de los hechos, los familiares de la víctima han explicado que el hombre cogió la boya para tener un punto de apoyo y poder llegar hasta la playa, pero que nada les hizo pensar que podría acabar muriendo en el agua. Según ellos, el hombre “se encontraba mal” y decidió nadar hasta la playa. De momento, todo apunta a una muerte accidental.