Transports Metropolitans de Barcelona ha presentado hoy la nueva uniformidad que llevará a partir de 2027 el personal de las redes de metro y autobuses. El nuevo diseño, que apuesta por la comodidad y mantiene los colores corporativos, sustituirá al actual que es de 1996, hace casi 30 años.
Para confeccionar las diferentes prendas, se han tenido en cuenta los resultados de la encuesta que se hizo en la plantilla que usa uniforme sobre cómo debería ser el nuevo vestuario. Los resultados de la consulta apuntaban a la necesidad de mejorar la comodidad y transmitir una imagen más moderna y actual para toda la plantilla. El 86% de los y las participantes prefería que el nuevo uniforme fuera de estilo casual, con el polo como la prenda de vestir estrella, tanto para el verano como para el invierno. También destacó la sudadera con cremallera, que fue la pieza de arriba escogida para el invierno para todo el personal.
La presidenta de TMB, Laia Bonet, ha anunciado que “la nueva ropa llegará a toda la plantilla durante el año 2027“. Ha recordado que “el modelo de ropa actual tiene casi 30 años y era necesario un cambio que será significativo para los y las profesionales de TMB y claramente perceptible por la ciudadanía, que tiene en su imaginario al colectivo de personas que cada día garantizan el derecho a la movilidad en Barcelona“.
La licitación del diseño de la ropa, que ha ganado la empresa Macon SA, incorpora también una cazadora como prenda de entretiempo y un chaleco y un anorak como prendas de abrigo. Se podrá escoger falda o pantalón y desaparecen la corbata y las camisas. Macon SA, empresa de moda familiar fundada en Barcelona, tiene una larga trayectoria en el sector, con experiencia consolidada en sastrería y moda.
En verano se licitará la producción de las prendas para los cerca de 6.500 trabajadores, 4.000 en Bus y 2.500 en Metro. El coste para sustituir la ropa actual por la nueva será inicialmente de 3,5 millones de euros, pero la licitación contempla hasta 8 millones de euros para la renovación de prendas en los años siguientes. El concurso público también incorpora un plan de recogida de la ropa antigua para su reciclaje o donación.
Un paso hacia un diseño más funcional
El uniforme actual requería un claro giro hacia la comodidad y el nuevo vestuario quiere transmitir una imagen más moderna y confortable, con un estilo casual, y un patronazgo ergonómico, adaptado para el hombre y la mujer.
En cuanto al abanico cromático, se ha jugado con el rojo y el granate TMB y los detalles en gris, respetando la imagen corporativa, con una picadura de ojo en la línea curva del logotipo de TMB presente en los polos, que también distinguirán entre el colectivo base y el resto de funciones.
En cuanto a los pantalones, se han presentado dos opciones: tipo “chino” o bien “cargo”, con bolsillos a los lados. Los nuevos diseños han escogido tejidos ligeros, manga corta para el verano, y tejidos cálidos y manga larga para el invierno.
Además, se ha añadido una chaqueta con diferentes piezas que se pueden llevar juntas o separadas, permitiendo diferentes adaptaciones en función de las necesidades de cada momento: hay una parca exterior impermeable y resistente al viento que se puede llevar sola; una chaqueta interior de tejido softshell (combinación de poliéster y forro polar) que también se puede llevar sola, con o sin mangas; y la tercera opción, que ofrece mayor protección contra el frío y la lluvia, es llevarlas ambas. Estas piezas reúnen también las máximas prestaciones en ergonomía y confort.
