“Ya no nos atrevemos a tener un local físico; de cara al público no podemos estar. La delincuencia que hay en Terrassa es horrorosa, los Mossos saben quiénes son y no hacen nada”, lamenta a Diario La Ciudad la propietaria de MX Informática, Meritxell Antón.
MX Informática
es un establecimiento especializado en la venta de ordenadores reacondicionados y nuevos y su filosofía empresarial apuesta por el reciclaje de productos tecnológicos. Aunque solo llevaban 10 meses abiertos, MX Informática ya se estaba empezando a hacer un nombre, la clientela estaba contenta y el servicio que ofrecían gustaba, y mucho. Sin embargo, el matrimonio que lleva la tienda ha tenido que decir adiós en contra de su voluntad.
Tal y como explicaban a través de redes sociales los propios propietarios “la madrugada del lunes hacia las 2:15 los llamaron de la Central de Alarmas que se encontraban en la ciudad”. los estaban robando por segunda vez en 2 meses en su tienda.“. Por este motivo, expresaban que “se ven obligados a bajar la persiana y anunciaban que “ofrecerán los mismos servicios pero online“.
MX Informática sufrió el primer robo el día 15 de diciembre en plena luz del día, cerca de la 13 h del mediodía. En declaraciones de la propietaria en el Diario La Ciudad, Meritxell Antón recuerda que “un minuto más tarde de ir a buscar a su hijo ya les entraron a robar y se llevaron 19 portátiles“.
Un episodio similar al vivido en diciembre se volvía a producir hace pocos días durante la madrugada del 4 de marzo. Según explica la propietaria “los llamaron de la central de alarmas a las dos y cuarto de la mañana. Los delincuentes destrozaron la persiana y el escaparate y les cogieron 17 portátiles“.
Sufrir dos robos en poco más de dos meses es lo que ha acabado empujando al matrimonio que había decidido emprender este pequeño negocio ubicado en la Avenida Abat Ribagorçana de Terrassa a bajar la persiana definitivamente.
Así lo anunciaban hace tres días a través del Instagram oficial de la tienda: “Una verdadera VERGÜENZA y lo escribo con mayúsculas para resaltar cómo nos llegamos a sentir los dos. Un negocio familiar, un futuro para nuestro hijo, que se ha quedado en el recuerdo, gracias a gente sin alma que para no trabajar destrozan a los demás ciudadanos robando su comida de cada día”.
En este sentido, tal y como nos ha podido confirmar la propietaria del establecimiento “los dos golpes que fue a los mozos le dijeron que ya sabían quiénes eran los delincuentes y que los tenían fichados. Pero que después de cogerlos los volvían a dejar rápidamente en libertad“.
El matrimonio está frustrado, se siente impotente y denuncian que “no hay justicia”, además de reclamar “más y mejor seguridad para la ciudadanía”. Una impotencia que les hacía concluir así la carta que compartían a través de sus redes sociales: “Sólo los que lo habéis sufrido nos podréis entender, la impotencia que se llega a sentir. Ahora nos toca apretar los dientes y tirar adelante, acabar de vaciar nuestra tienda y tirar los letreros y carteles que un día nos aportaron una gran sonrisa en la cara y que ahora se han convertido en un montón de lágrimas. ¡Gracias a todos los culpables por hacernos sentir así! ¡Disfruté mucho de lo que nos habéis robado!”