Marc Boada Ferrer, divulgador científico bastante conocido por presentar el programa ‘Quèquicom’ en el Canal 33, murió ayer martes a la edad de 60 años según anuncia Món Terrassa.
El polifacético presentador nació en Terrassa en 1963, y no fue hasta 2006 que comenzó a colaborar en el programa de divulgación científica ‘Quèquicom’ como asesor. En 2008 asumió la presentación del programa, que ostentó hasta 2011, tiempo de sobres para convertirse en popular.
PERSONA POLIFACÉTICA
En el muro de Facebook de Marc boada se definía como ‘divulgador científico, conferenciante, escritor, escultor y experto en ciencia experimental’. Profesionalmente, estudió densificación industrial en los Salesianos de Terrassa y había seguido un curso de escultura la Escuela de Artes Aplicadas de Terrassa.
En cuanto a su obra escultórica, la más extensa es el conjunto de esculturas que forma el Jardín de las Percepciones del Parque de Vallparadís en Terrassa, que en 2009 recibió el premio Entorno Natural Joan Martí, otorgado por la Asociación Discapacidad Visual de Barcelona.
También había practicado actividades paleontológicas y arqueológicas, llegando a descubrir más de treinta yacimientos con restos de dinosaurios y llegando a describir una nueva clase de dinosaurio llamado Koutalizaurus Kohlerorum.
Asimismo, colaboró en más de 30 exposiciones, construyendo más de 200 módulos interactivos para diferentes museos y centros de ciencia y trabajó como maestro en la Escuela Massana.
Boada, vivía actualmente en el Montseny donde regentaba el Cau del científico. Allí hacía talleres y actividades para alumnos de primaria y secundaria.
Boada también escribió libros como Max Picard y el maldito péndulo de Foucault, Max Picard y el enigma de los dinosaurios y Los 3 infinitos. Un libro de ciencias para gente de letras.