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Ya están en marcha los trabajos para sustituir los cinco pantalanes de hormigón del Muelle de Passanante del Port Olímpic por pantalanes flotantes. Según el Ayuntamiento de Barcelona, se adaptarán mejor a los efectos del cambio climático como inundaciones o la subida del nivel del mar. Mientras duren los trabajos, que tendrán una duración de un año, el Puerto Olímpico continuará operativo. Los tres pantalanes de los muelles de Gregal, Mistral y Marina, que actualmente ya son flotantes, también se renovarán, así como todas las torretas de suministro de agua y electricidad para los barcos. Se prevé una inversión de 4,3 millones de euros.
La primera teniente de alcaldía y presidenta de BSM, Laia Bonet, destaca la importancia de esta actuación que, además de garantizar un mayor confort, seguridad y experiencia de uso de los amarres, dotará al nuevo Puerto Olímpico de una “mayor resiliencia” ante los efectos del cambio climático.
Bonet recuerda que el Puerto Olímpico ya reforzó el Dique de Recer para minimizar los efectos de los temporales, cada vez más frecuentes y más intensos. Y ha añadido que ahora da un paso más y renueva sus pantalanes “para adaptarlos a la subida del nivel del mar que provoca el calentamiento global”.
Los trabajos de sustitución de los pantalanes, que supondrán una inversión de 4,3 millones de euros, tendrán una duración aproximada de un año y se harán por fases, garantizando en todo momento la operativa del Puerto Olímpico.
