El debate sobre el futuro del aeropuerto de El Prat ha enfrentado sistemáticamente a partidos, empresarios y agentes locales, especialmente en los últimos años. Todos los partidos excepto la CUP quieren que el Prat se erija como referente intercontinental, pero divergen del camino a seguir. PSC, Junts, VOX, Cs y PP están de acuerdo en ampliar las instalaciones, si bien no hay unanimidad en cómo hacerlo y cada uno tiene diferentes prioridades. A su vez, ERC y Comunes quieren mejorar la competitividad de El Prat pero se niegan a que sea a costa de agrandar la infraestructura y se oponen a cualquier afectación en el espacio natural de La Ricarda. Republicanos y comunes también reclaman que Cataluña gestione la gobernanza del aeropuerto, una petición que Junts y CUP comparten.
Ampliar el aeropuerto de El Prat es la opción predominante entre los principales partidos que se presentan a las elecciones de este domingo, según exponen los miembros de las candidaturas entrevistados por la ACN. Desde el PSC, la número 2 en las listas de Barcelona, Alícia Romero, afirma categoricamente que agrandar las instalaciones es “una de las primeras decisiones” que tomará su partido si gobierna la próxima legislatura. “Nos pondremos a trabajar con el consenso que haga falta, tambiénel del territorio afectado”, añade, asegurando que la ampliación “se puede hacer con respeto por el entorno natural”.
Romero resalta que ensanchar el aeropuerto es indispensable para ganar competitividad en el conjunto de Europa, y señala que la economía catalana “lo necesita” para mejorar las exportaciones y atraer más talento. En relación a cómo hacer la ampliación, los socialistas creen que una pista hacia el mar sería la solución “más óptima”, si bien precisan que antes de tomar cualquier decisión estarán atentos a lo que digan los expertos en ingeniería y aeronáutica.
Por su parte, Junts apuesta por ampliar las instalaciones con una terminal satélite construida en el vértice de ‘la espada’ que caracteriza a la T1, cerca de la Ricarda pero sin llegar a invadir este espacio natural. Con todo, el número 3 de la candidatura, Josep Rull, recalca que antes de hacer crecer las instalaciones hay otras cuestiones a afrontar “para dejar de ser la Terminal 5 de Barajas”. En este sentido, Junts reclama que primero de toda Cataluña necesita asumir la gobernanza íntegra de El Prat “para dejar de ser un aeropuerto subsidiario de Madrid y poder competir en igualdad de condiciones”.
Rull sostiene que la gestión directa permitiría hacer una propuesta más atractiva para los grandes vuelos intercontinentales. Sobre las limitaciones operativas, asegura que, si se gobernara desde Cataluña, se podrían aplicar nuevos sistemas de gestión de las pistas para reducir la distancia entre los aviones durante los aterrizajes y despegues, y utilizar las pistas de forma independiente en momentos puntuales. Al mismo tiempo que se reconfigurara la planificación, Junts propone que se deriven a Reus y Girona los vuelos de bajo coste que no son escala y que ahora tienen origen o destino Barcelona.
Desde VOX defienden que ampliar el aeropuerto es necesario para dar respuesta a las necesidades de negocio de las compañías aéreas, “las cuales, si Barcelona no les da opción de ganar rentabilidad, preferirán ir a Barajas y otros hubs europeos”. El número 7 de la lista de Barcelona, Andrés Bello, avisa de que en Madrid Aena”está invirtiendo sin los problemas que en Cataluña ponen la Generalitat y los agentes locales”, si bien no concreta cuál es técnicamente la propuesta de VOX para hacer crecer las instalaciones.
En relación al encaje con la Ricarda, Bello apela a seguir “el mejor criterio técnico y el mejor respeto posible por el medio ambiente”, y considera que la afectación a este espacio natural se puede compensar con la protección de otros lugares del delta del Llobregat para crear hábitats similares “en las condiciones adecuadas”.
Quien también apuesta por ampliar el aeropuerto y estudiar una compensación es Ciudadanos. La número 2 de la lista, Marina Bravo, dice que su formación es “muy consciente” de que ensanchar las instalaciones tendrá repercusiones medioambientales pero pide que se tenga en cuenta que detrás hay una “justificación económica y social”, y considera que es viable regenerar el espacio perdido en otra zona del delta “con más terreno y mejores condiciones de biodiversidad”.
A la hora de definir cómo ampliar el aeropuerto, Bravo pide escuchar a los ingenieros “para negociar si se pone más asfalto solo a un lado de la tercera pista o si lo ensanchamos por los dos extremos”. “Se está vistiendo esta cuestión de enorme complejidad pero al final un aeropuerto es una pista asfaltada”, añade, sin cerrar la puerta a utilizar las pistas actuales de forma independiente para ganar más capacidad operativa. Bravo lamenta que el debate sobre el futuro de El Prat se esté dilatando tanto en el tiempo porque considera que esto está generando “desconfianza” a eventuales inversores.
A su vez, el PP también se ampara en la necesidad de mejorar la competitividad de la economía catalana en un momento en el que el aeropuerto de Barcelona “ha llegado casi al máximo de su capacidad”. “Es impresindible ampliarlo para mejorar el posicionamiento turístico y empresarial”, afirma el número 4 de los populares, Santi Rodríguez, que admite que “no hay una solución óptima que permita evitar afectaciones a terceros”.
En este sentido, los populares apuntan que “no se puede plantear” hacer ningún cambio en El Prat que implique el uso de pistas independientes porque eso dañaría directamente el bienestar de los vecinos de Gavà por el incremento de ruidos. Sí ven más viable estudiar las ocho propuestas presentadas hace un año por Fomento del Trabajo, “aunque tengan afectación en La Ricarda”. “Son opciones más viables, y hay que trabajar el menor impacto ambiental”, dice Rodríguez.
ERC, Comunes y CUP rechazan la ampliación
En el lado opuesto de las voces favorables a la ampliación están ERC, Comunes Sumar y la CUP. Las tres formaciones ven innecesario ensanchar las instalaciones, y los lagareros incluso apuestan por un decrecimiento de la actividad.
Los republicanos afirman que “no es impresdincible ampliar para ser más competitivos” y reclaman que la gestión de El Prat se asuma desde Cataluña “para dejar de lado los criterios empresariales en los que se basa ahora Aena”. El número 11 de la lista, Jordi Albert, recuerda que recientemente el líder republicano Pere Aragonès ha planteado hacer cambios en la operativa de los vuelos con el uso de pistas independientes algunas horas, pero lamenta que esta opción no se podrá materializar “si Cataluña no tiene la gobernanza, porque el criterio de Aena no tiene en cuenta el interés general”.
Albert considera que la intención de Aena de hacer crecer la tercera pista en dirección a La Ricarda “es una agresión medioambiental del todo absurda” y afirma que evidencia “una falta de planificación evidente”. “La solución no siempre es poner cemento, que es lo que parece más fácil, sino que hay que gestionar mejor”, recalcan los republicanos.
Desde Comunes Sumar también reclaman cambiar el sistema de toma de decisiones. Proponen replicar el modelo de gestión del Puerto de Barcelona, donde tienen voz y voto la Generalitat, los ayuntamientos afectados y el estado español. El número 2 y alcalde de El Prat de Llobregat, Lluís Mijoler, considera que afrontar las inversiones sin una gestión realizada desde el territorio es “ir al revés” de lo que requiere la actual situación “de emergencia climática”.
“Cuando tengamos la capacidad de gestión, veremos cómo podemos adaptar la infraestructura a las necesidades reales”, añade, criticando que las políticas de los aeropuertos “ahora solo se valoren con los intereses de los lobbys’. Mijoler dice que, “si hubiera que crecer”, la opción prioritaria de Comunes Sumar sería interconectar por tren los aeropuertos de Girona y Reus con Barcelona con el fin de mejorar la competividad aeroportuaria, y rechaza cualquier crecimiento que invada la Ricarda.
Por su parte, la CUP también se posiciona a favor de que Cataluña lidere la gestión de los aeropuertos catalanes. “Tenemos que afrontar un debate sobre el modelo de país hecho desde aquí, y no por Aena ni por el gobierno español”, reafirman los lagareros, que consideran que los cerca de 50 millones de pasajeros que pasan anualmente por El Prat son una cifra “frapante” que hay que reducir para combatir los efectos del cambio climático.
La miembro de las listas Montserrat Vinyuets considera que la ampliación de El Prat no es una necesidad real, sino una cuestión planteada “por una colección de accionistas” de Aena que se mueven “para hacer más jugosos sus rendimientos empresariales”. Lamenta que el debate se haya focalizado en cómo ampliar las instalaciones o incrementar la operativa para atraer inversores, “cuando este argumento ya se utilizó para construir Alguaire, que ha sido un fracaso absoluto”. Viñedos insiste en que “hay que pensar en reducir vuelos y construir alternativas sostenibles” y defiende la preservación de la Ricarda, “pero también el cuidado del derecho a una salud digna sin afectaciones acústicas”.
