Esta semana Teresa Pallarès y Noemí Llauradó, las cabezas de lista de Junts per Catalunya y ERC en la ciudad de Reus, se reunieron en un restaurante de Tarragona con Sebastià Domènech, concejal municipal del PP, según ha explicado el mismo Domènech en algunos de sus círculos íntimos.
Posibilidad de un pacto a 4 en Reus: ERC, Junts, CUP y PPEl objetivo de los partidos independentistas es conseguir que el PP apoye la investidura de Noemí Llauradó en un gobierno con Junts y la CUP, y de esta manera dejar a Sandra Guaita, ganadora de las elecciones con el PSC, sin la alcaldía. Después de la investidura, ERC presentaría el acuerdo de gobierno con Junts y cupaires, mientras que los compromisos adquiridos con el PP se cumplirían después de las elecciones generales del 23 de julio. Fuentes de Junts han confirmado el encuentro, pero solo añaden que ERC habría ofrecido al PP el control de alguna de las empresas municipales.
Aunque la noticia surgió como un rumor y la CUP no le dio mucha credibilidad, fuentes del partido han explicado que se pusieron en contacto con ERC Reus y que los republicanos confirmaron el encuentro con Domènech. A pesar de esto, la CUP asegura que no tiene ninguna intención de cumplir ningún acuerdo con el PP una vez pasadas las elecciones.
El PP confirma el encuentro con ERC en Reus
El concejal popular Sebastià Domènech ha confirmado a La Ciutat que el encuentro con ERC se ha producido, pero asegura que estos contactos, "como es normal después de unas elecciones", se están dando con todos los partidos.
Sobre la posibilidad de recibir cargos en empresas municipales, Domènech solo ha concretado que desde ERC "se están ofreciendo responsabilidades" a cambio de un posible pacto de investidura, pero sin concretar cuáles serían estos cargos.
Junts querría la presidencia de la Diputación
Por parte de Junts, Teresa Pallarès estaría intentando forzar a ERC a un acuerdo para ser la presidenta de la Diputación de Tarragona a cambio de sus votos para la investidura, un hecho al cual Noemí Llauradó se habría comprometido durante la campaña electoral.
En ERC están "preocupados por la deriva de Llauradó"
Fuentes de ERC, por su parte, aseguran que el partido está "preocupado por la deriva de Llauradó" y que la candidata no habría aún aceptado los resultados electorales. Señalan su entorno y, especialmente, a la jefa de gabinete de la Diputación como principal instigadora de esta nueva estrategia. De hecho, aseguran que ERC no tiene ninguna intención de cumplir los acuerdos a los cuales puedan llegar con el PP ni siquiera después de las elecciones generales.
De momento, los populares esperan una contraoferta de Sandra Guaita, que ya ha llegado a un preacuerdo con Ara Pacte Local. La candidata socialista, pero, ha dicho que "no quiere convertir la alcaldía de Reus en un mercado persa" y que no habrá contraoferta.
Así pues, la pelota está sobre el tejado del PP, que tiene en sus manos la posibilidad de evitar un gobierno del PSC, pero a cambio facilitar un pacto independentista en la segunda ciudad más poblada de Tarragona. Fuentes cercanas al partido indican que Domènech "votará en clave Reus", pero inciden en el hecho de que consideran "imposible que Domènech se salte la disciplina del Partido. Es una persona sensata, respetada y un hombre de prestigio del PP que ha luchado toda la vida por nuestras siglas".
El problema para los populares es que en seis semanas hay elecciones generales, y un pacto del PP para dejar hacer gobierno a los independentistas e ir en contra de un partido constitucionalista, aunque sea el PSC, podría convertirse en un escándalo en el ámbito nacional, donde sus votantes podrían no entender la postura y Vox podría aprovechar para hacerse fuerte.