La Guardia Urbana de Tarragona y los Mossos d’Esquadra han completado un dispositivo intensivo en el barrio de Sant Salvador entre el 6 y el 26 de octubre, con la mirada puesta en la prevención, la convivencia y la reducción del incivismo.
El plan ha sumado 321,5 horas de servicio coordinado y 22 acciones planificadas: patrullajes a pie, controles de alcoholemia, vuelos de dron, inspecciones administrativas y entradas a dos locales, entre otros.
Resultados principales
- 2 detenidos (por quebrantamiento de condena y por delito contra la salud pública).
- 110 personas identificadas y 53 vehículos controlados.
- Denuncias: 16 por tráfico, 10 por incivismo, 8 por drogas y 1 por vertido de residuos.
- 4 armas intervenidas (armas blancas y objetos peligrosos).
- 3 establecimientos y puestos del mercado semanal inspeccionados: 2 denuncias y 1 acta por diversas infracciones.
El operativo ha reforzado también la proximidad con el vecindario y el comercio, con el objetivo de fortalecer la confianza y la detección precoz de conflictos.
Dispositivo y coordinación
Han tomado parte diversas unidades de la Guardia Urbana (UPRP, UIA, UDRON, UCAN, UPP, UMA), y de los Mossos (USC y ARRO). También se han sumado agentes de la Policía Nacional, que emitieron 4 citaciones por incumplimiento de la ley de extranjería. Paralelamente, se ha trabajado con servicios municipales como el IMSST y la EMT para dar respuesta integral a las necesidades del barrio.
Antecedente en Levante
Este verano se ejecutó un plan de acción en las urbanizaciones de Llevant (30 de junio – 5 de septiembre): 33 controles, 25 vehículos controlados, 20 personas identificadas y 3 denuncias de tráfico. Comerciantes y vecinos trasladaron su satisfacción por el dispositivo.
Planificación anual y modelo preventivo
Estos planes se incluyen en una estrategia anual focalizada en puntos concretos y estratégicos de la ciudad, con apoyo de los Mossos. El objetivo es anticipar riesgos, mejorar la respuesta ante situaciones de incivismo o inseguridad y fortalecer el vínculo entre policía y ciudadanía, especialmente en zonas residenciales. El modelo insiste en medidas preventivas y disuasorias como clave del éxito.