El PP de Tarragona ha comparecido este martes en el marco de la situación económica municipal de la ciudad de Tarragona. Para poder impedir este 20% de subida del IBI que pide el alcalde Rubèn Viñuales, los populares no aceptarán según recalca Martorell y no se ajustarán en ningún aumento mínimo de este, ya que creen que hay caminos mejores para revertir la situación.
Proponen unas vías diferentes para poder cuadrar estos presupuestos y sin ampliar estos. Han puesto sobre la mesa diferentes cambios como un nuevo plan de choque, unas acciones a corto y largo plazo. Un análisis para saber qué se gasta en el total, en saber la cantidad de inversión de cada departamento y poner cantidades realistas en estos presupuestos ha apuntado la líder de los populares, Maria Mercè Martorell. Con el planteamiento de hacer estas contabilidades analíticas cada trimestre y poder hacer traspaso de unas partidas a otras si es necesario, sin incrementar el gasto fiscal.
Han ofrecido la nueva vía de buscar nuevas inversiones que facturen a la ciudad. Se trataría de una nueva financiación, donde Martorell ha apuntado que gira sobre la idea de "más pagamos menos" y así "no propiciar la marcha de ciudadanos a poblaciones cercanas". En el marco de las propuestas de corto plazo proponen la venta de patrimonio, es decir, espacios que sean elementos para dinamizar para que no se concentre el turismo en una zona y que se distribuya en la ciudad. La venta de inmuebles, pisos y solares se trataría de unos 5 millones de euros con ingresos.
Martorell también ha recalcado que en el Ayuntamiento ha tenido superávit en los últimos años. En el 2019 , 9 MEUR, en el 2020, 13,8 MEUR, en el 2021, 8 MEUR y el 2022, 7 MEUR. Un dinero que ha sobrado según la portavoz del PP de Tarragona.
En conclusión, el Partido Popular en Tarragona apunta a presupuestos que no sean inflados, que sean realistas. También piden la devolución de importes que debe el estado y la Generalitat a la ciudad. 4 MEUR provienen de las estatales.
