Este miércoles, el alcalde Pere Virgili, acompañado por Rosana Dorantes, concejala de Enseñanza; por Manel González, concejal de Urbanismo; y por el arquitecto municipal, Miquel Bonnin, pudieron comprobar en primera persona cómo avanzan las obras del nuevo centro de educación secundaria y hacer un recorrido por todo el edificio. Durante el itinerario contaron con las explicaciones detalladas de Xavier Ferré, director de la obra; de miembros de la empresa adjudicataria, la leridana M y J Gruas S.A.; y de Miquel Àngel Martínez, en representación de los Servicios Territoriales de Enseñanza.
Después de doce años con los jóvenes estudiando en barracones prefabricados, durante los cuales el Ayuntamiento y las familias rodenques reclamaron insistentemente la construcción de un centro digno, las obras del nuevo edificio del Instituto Roda de Berà se iniciaron a finales del pasado mes de agosto. Los trabajos de construcción han ido avanzando a buen ritmo durante los últimos meses y se espera que finalicen en junio del año que viene. Aprovechando las vacaciones de verano se hará el cambio al nuevo edificio y el curso 2024/25 ya se pondrá en marcha allí. Las obras han sido condicionadas en todo momento a la existencia, en el mismo solar, de los módulos prefabricados donde siguen estudiando los jóvenes hasta que el nuevo edificio esté terminado. Esto dejaba como espacios libres para poder ubicar las nuevas instalaciones, la franja norte, junto a la escuela Salvador Espriu, y el este, en la plataforma inferior, donde se construyó la primera de las pistas deportivas para que el alumnado pudiera tener mientras tanto un mínimo de espacio para el patio y las actividades de exterior.
El nuevo instituto será un centro moderno, tanto estéticamente como en cuanto a los equipamientos, muy amplio y luminoso, una característica que sorprendió muy gratamente al equipo de Gobierno y al arquitecto municipal durante la visita de ayer. Tendrá una superficie de 8.500 metros cuadrados, con tres líneas para cada curso, dando respuesta a las necesidades de un municipio como Roda de Berà, con una población de más de 8.000 habitantes en constante crecimiento. Por la ubicación del centro, la entrada principal, con un gran porche, estará próxima a la pasarela que comunica con el núcleo urbano, la cual permitirá un encuentro tranquilo y seguro para el alumnado y las familias, sin tránsito rodado. Se prevé también otro punto de entrada, ubicado en el lado opuesto, desde la calle de la Font, donde habrá un acceso para vehículos y peatones adaptado.
La planta baja contará con ocho aulas muy espaciosas, una de ellas de dibujo, una biblioteca, varios despachos y lavabos adaptados. Subiendo hasta la primera planta encontraremos tres aulas más, laboratorios, la sala de profesores, los despachos de dirección, el archivo, un despacho para la AFA y otro para la asociación de alumnos, la cafetería con una terraza, y la zona de conserjería y administración. La segunda planta contará con cuatro aulas más de ESO, una de música, un aula taller, diferentes aulas de refuerzo, y despachos de los departamentos. Finalmente, en el semisótano los alumnos disfrutarán de un gran gimnasio con un escenario y vestuarios diferenciados. Una vez que el alumnado ya esté en el nuevo centro, se iniciará la última fase de las obras, con la retirada de los módulos prefabricados y la posterior construcción, en este mismo espacio, de las pistas deportivas grandes y de las zonas ajardinadas.
