Junts en el Congreso ha registrado una proposición de ley que defiende que todos los pueblos dispongan de servicios bancarios y cajeros. Este texto quiere proteger especialmente a los municipios en riesgo de exclusión financiera, es decir, que no dispongan de cajero automático en su término municipal.
Además, tiene como finalidad garantizar el acceso a los servicios bancarios básicos a través de un servicio de cajero automático de proximidad, con independencia del municipio de residencia. Esta problemática afecta a más de 500 municipios catalanes, 87 de los cuales en la demarcación de Tarragona, cifra que representa el 46% de los pueblos de nuestras 10 comarcas, en los cuales viven más de 38.000 personas que no tienen en el municipio ningún tipo de servicio bancario.

Como se ve en el gráfico facilitado por Junts, en algunas comarcas de la demarcación, la mitad o más de la mitad de los municipios, no disponen de cajero: Priorat (91%), Conca de Barberà (63%), Alt Camp (58%) y Terra Alta (50%). Aun así, es en el Tarragonès, por el volumen de población, donde más ciudadanos viven en poblaciones sin cajero, un total de 7.644 habitantes.
El portavoz adjunto del grupo parlamentario de Junts per Catalunya en el Congreso y diputado por Tarragona, Josep Maria Cruset, ha señalado que “cuando el sistema bancario español se encontró en riesgo, se le rescató con una inyección de dinero público sin precedentes”.
En este sentido, el diputado recuerda que “este rescate fue soportado con el esfuerzo tributario de todos los ciudadanos, independientemente de su edad o del lugar donde vivieran. Es por eso que no se puede permitir que ahora, una parte de estos ciudadanos se queden sin los servicios bancarios que contribuyeron a preservar”. Cruset defiende que “tengas la edad que tengas y vivas donde vivas, tienes que tener derecho a vivir con los mismos servicios esenciales”.
Así pues, con el fin de resolver esta carencia la proposición de ley prevé lo siguiente:
- Define como municipios en riesgo de exclusión financiera aquellos que no dispongan de cajero automático en el término municipal.
- Prevé, en primer lugar, la instalación voluntaria de los cajeros por parte de las entidades.
- Si en el régimen de instalación voluntaria no se cubren las necesidades de todos los municipios en riesgo de exclusión financiera, se activará el régimen de instalación obligatoria. En este caso, la instalación se financiará a cargo de unos Fondos de nueva creación: Fondo de garantía del servicio de cajero automático en los municipios en riesgo de exclusión financiera, adscrito a la Administración General del Estado y su dotación será territorializada.
- El Fondo se dotará a partir de las aportaciones de las mismas entidades en función de su implantación en cada demarcación, y se calculará en relación con la cuota de mercado en depósitos y créditos. Las administraciones públicas interesadas podrán ejecutar de forma subsidiaria la instalación de los cajeros automáticos a cuenta de los recursos del Fondo de Garantía.
- El servicio de estos cajeros deberá ser continuado las 24 horas del día, 365 días al año y se ofrecerán en las lenguas cooficiales de cada territorio. Además, prestarán, como mínimo, las funciones básicas de retirada e ingreso de dinero en efectivo, realización de transferencias, pago de recibos y tributos, consultas de movimientos y obtención de extractos.
Por su parte, el diputado por Lleida, Isidre Gavín, defiende que “esta injusticia se tiene que rectificar. El gobierno español ha permitido que la banca cierre los servicios en los pueblos pequeños, dejando a mucha población desamparada, sobre todo del mundo rural y gente mayor”.
Gavín señala que “esta es la primera ley del mandato y es sobre mundo rural porque para nosotros es una prioridad trabajar por la calidad de vida de los pueblos pequeños y las personas que habitan en ellos. Es un acto de justicia con la población que vive en el territorio y lo cuida”.
Para Gavín conseguir estos servicios para el territorio “es crucial”. “Se tiene que romper esta inercia si queremos revertir la despoblación. No se puede luchar contra este hecho sin servicios como los financieros, que son necesarios para todo el mundo”, ha reivindicado el diputado.