«¿Qué haremos con la basura en Torredembarra?». Con este título, se llevó a cabo este martes, 7 de marzo, una charla abierta a la ciudadanía sobre el presente y el futuro del servicio de recogida de basuras, con la participación del alcalde de Torredembarra, Eduard Rovira; el concejal de Vía Pública y Mantenimiento, Raúl García, y Teresa Guerrero y Naiara Comas, representantes de la Agencia de Residuos de Cataluña. Con las premisas generales para toda Cataluña de que la recogida de los residuos tiene un coste elevado y cada vez será más caro, que hay que reducir la generación y sobre todo de la fracción resto, que hay que aplicar sistemas eficientes de recogida selectiva que limiten precisamente la aportación de la fracción resto y que la clave del éxito es la participación de la ciudadanía, se fue explicando cómo el logro de los objetivos europeos de reciclaje para los próximos años afectarán directamente a Torredembarra, que vivirá importantes cambios en el sistema de recogida de residuos.
En los años venideros, y para cumplir los objetivos de la Unión Europea, se debe incrementar el nivel de recogida selectiva y, en consecuencia, de reciclaje. En el año 2021 en Cataluña la recogida selectiva se situó en el 49 % y el reciclaje en el 39 %. Los objetivos europeos de reciclaje son del 55 % en 2025, el 60 % en 2030 y el 65 % en 2035. Además, el tratamiento en vertederos de la fracción resto que se sitúa en Cataluña en el 34 % (2021) deberá ser sólo del 10 % en 2035. El incumplimiento de estos objetivos comportará sanciones económicas importantes que supondrán un incremento del precio de la recogida de basuras que deberá repercutirse directamente en la ciudadanía.
Para evitar esta situación, hay que reducir la generación de residuos, sobre todo la generación de la fracción resto (todo mezclado sin separar) y que acaba eliminándose en vertederos o incineradoras, con la correspondiente huella ambiental y elevados costes económicos. Para hacer este cambio, además de contar con una mayor concienciación ciudadana, se ha previsto la implementación de la tasa justa, es decir, que pagará menos quien mejor separe. Para poder personalizar la tasa, existen dos sistemas eficientes: el puerta a puerta y los contenedores cerrados, ya que para abrirlos es necesaria una tarjeta identificativa del usuario.
Según datos de la Agencia de Residuos de Cataluña, en Torredembarra, en 2021 se recogieron 10.728,68 toneladas de residuos, de las cuales 6.167,74 correspondían a fracción resto, mientras que las 4.560,94 restantes habían sido separadas selectivamente (un 42,51% de recogida selectiva), lo cual comportó ahorrar en emisiones de CO₂ lo que equivaldría a 900 vehículos circulando todo el año. Pero es evidente que el ahorro de emisiones gracias a la recogida selectiva en Torredembarra todavía tiene mucho potencial.
Las medidas que ya se han ido adoptando en Torredembarra para alcanzar los objetivos europeos son la implementación de la recogida puerta a puerta en diferentes barrios del municipio (Casco antiguo, Sant Jordi, Babilonia, Clarà y Baix a Mar) y a medio plazo desarrollar un nuevo proyecto de fomento de la recogida selectiva para el cual se ha recibido una subvención de 349.555 € de los fondos Next Generation. Algunas acciones de este nuevo proyecto son la ampliación del puerta a puerta en las Ámfores y extenderlo también a la Marítima, y la implantación de contenedores cerrados con tarjeta identificativa en el resto del municipio, donde predomina el urbanismo vertical. Todo ello permitirá implementar la tasa justa como es el pago por generación.
Estas nuevas acciones se podrán poner en marcha cuando se licite el nuevo contrato de la recogida y transporte de residuos. Desde este mes de febrero, el servicio de recogida y transporte de residuos se lleva a cabo a través de un contrato de transición hasta que salga a licitación el nuevo contrato y se adjudique. Con todo, se han incorporado toda una serie de mejoras respecto al servicio que se llevaba a cabo anteriormente y que presentó muchas carencias. El precio del servicio se ha incrementado de los 900.000 € anuales hasta los 2.166.121,95 € anuales, IVA incluido.
De hecho, conseguir llegar a los objetivos europeos y evitar sanciones económicas conlleva dedicar más recursos para realizar todos los servicios necesarios que ayuden a obtener unos buenos resultados. Pero también será necesaria una mayor implicación de la ciudadanía, resaltando la de segunda residencia, y de los establecimientos comerciales, especialmente de la restauración donde se ha detectado que se hace poca separación.