Esta semana han comenzado los trabajos de remodelación de los jardines de Francesc Macià de Vilanova i la Geltrú, donde se eliminará buena parte de los pavimentos de hormigón originales de la urbanización del espacio en 1981. En esta intervención se definieron y configuraron los diferentes espacios de la plaza y zonas verdes tal como los conocemos actualmente.
La intervención que ha comenzado reducirá la actual dureza de la plaza creando un itinerario que conectará las calles del Jardí y de Francesc Macià. Este nuevo camino, que no cubrirá toda la superficie, se extenderá para comunicar las zonas de ocio, el centro cívico de Sant Joan y hasta la calle de Josep Coroleu. Estas travesías se plantean como un deambulatorio que rodeará la zona arbolada y la fuente ornamental.
El resto de la actual superficie de hormigón, actualmente unos 2.500 m², será sustituida por pavimentos naturales de sablón y parterres con tierra vegetal, de forma que se ganarán más de 1.200 m² de superficie blanda. El objetivo es naturalizar un poco más el conjunto y conseguir hacer más eficiente el drenaje natural del suelo con esta combinación de tierras y superficies más blandas.
La actuación supondrá una inversión de 100.000 euros y es una de las propuestas pendientes de ejecución de los presupuestos participativos del año 2021 convocados desde la Concejalía de Participación. Los jardines de Francesc Macià se han convertido en un ágora de centralidad urbana y punto de encuentro para los vecinos de Sant Joan.
La mejora de los jardines conllevará también la sustitución del mobiliario urbano. Se renovarán una veintena de bancos con un nuevo modelo con respaldo y brazos laterales para mejorar la accesibilidad para las personas mayores. También se instalarán nuevas papeleras, carteleras, aparcabicis y una fuente de agua potable con un diseño adaptado para personas con movilidad reducida, como la que se ha instalado recientemente en la plaza del Mercat.
Se aprovechará la actuación para mejorar el alumbrado de la zona con nuevas lámparas más eficientes. El espacio conservará la pérgola metálica con las dos líneas de arcadas con enredaderas y la fuente ornamental con surtidor.
Los parterres serán ajardinados con especies arbustivas autóctonas y se renovará el arbolado preexistente. El espacio ganará 4 árboles nuevos, cuatro ejemplares de árbol del amor o árbol de Judea (Cercis siliquastrum). Se trata de un árbol mediterráneo característico por su floración, que puede ser de color púrpura o blanca, y que colorea completamente la copa del árbol, por lo que es muy utilizado en el arbolado viario como especie ornamental.