La campaña de excavaciones en la villa romana de Darró continúa dando sus frutos. La semana pasada finalizó el campo de trabajo de verano, en el que cerca de una quincena de voluntarios, bajo la dirección técnica del Servicio de Patrimonio Arquitectónico Local de la Diputación de Barcelona, han estado realizando tareas de búsqueda de nuevo material arqueológico.
La primera teniente de Alcaldía y concejala de Cultura y Patrimonio, Teresa Llorens, ha destacado la importancia de fomentar y dar continuidad a este tipo de actividad por lo que significa para la ciudad. Para Teresa Llorens, el trabajo realizado a lo largo de todos estos años nos ayuda a poner en valor el patrimonio que tenemos en Vilanova i la Geltrú, su conservación y su difusión.
Los trabajos de este año se han seguido realizando en el espacio XVI de la villa, donde se ha podido documentar en buena parte de la estancia un pavimento y en el extremo unas tierras grisáceas con gran cantidad de cerámica de uso doméstico, principalmente ollas, cazuelas y tapaderas, que llega a Darró desde el norte de África, Argelia y Túnez.El director de las excavaciones y responsable del campo de trabajo, el arqueólogo Joan Garcia ha explicado que durante este séptimo año de trabajo en la zona nos encontramos hacia el año trescientos después de Cristo, en un espacio claramente doméstico de procesamiento de comida, con abundancia presencia de restos óseos, conchas y otras especies marítimas.
Entre los hallazgos que se han hecho este año hay fragmentos de agujas de hueso para hilar, una moneda que habrá que restaurar y fragmentos de pintura mural de tonalidades diversas, que indican la presencia de un espacio relevante cerca de esta zona el oecus o zona para recibir visitas y hacer negocios.
Esta parte del yacimiento corresponde mayoritariamente a una villa romana fundada a principios del siglo II después de Cristo. El objetivo de los trabajos es documentar las transformaciones que se produjeron en esta vivienda durante los siglos tercero y cuarto después de Cristo.
Adarró o Darró es un poblado ibérico que se encuentra al poniente del actual paseo Marítimo de Vilanova i la Geltrú, en el territorio antiguamente conocido como Cossetània. El establecimiento ibérico estuvo poblado entre los siglos V y I aC, mientras que la villa romana fue fundada a mediados del siglo I aC y estuvo habitada hasta el siglo VI de nuestra era.
