Un grupo de 54 familias de cinco promociones de HPO de InmoCritería en Sitges, Banyoles y Sentmenat han amenazado a la inmobiliaria con no pagar los alquileres si no detiene el proceso de privatización para vender los pisos. Con el apoyo del Sindicato de Inquilinos, todas retuvieron el pago del último recibo durante cinco días y advirtieron que, si no escucha sus demandas, “no verá ni un duro” a partir del mes de abril.
La entidad defiende la huelga de alquileres como una herramienta efectiva “para detener las expulsiones” que, dice, está haciendo la inmobiliaria a todos los inquilinos a quienes no les renueva el contrato con intención de poner los pisos a la venta. “La vivienda pública tiene que salir de las urnas de los negocios”, ha dicho el portavoz Enric Aragonès.