El Festival de Música Antigua de los Pirineos (FeMAP), que este domingo cerró su 12ª edición, ha decidido no continuar organizando conciertos en Ripoll. Así lo ha transmitido el director del certamen, Josep Maria Dutrèn, a la alcaldesa de la capital del Ripollès, Sílvia Orriols, en una reunión celebrada esta semana, en la que ha asegurado que algunas de las políticas que hace y plantea el nuevo equipo de gobierno "no son compatibles con los valores que el festival promueve" que son, según han dicho, los de "la justicia social, la integración y el respeto a los derechos humanos".
Las relaciones con Ripoll comenzaron en 2014, momento en que se llevó a cabo un primer concierto. A partir de entonces siempre se han ido programando diversas actividades cada año.
La reunión, en la que también ha participado el concejal de Cultura, Deportes, Educación, Juventud e Infancia, Albert Santandreu, se ha llevado a cabo con un tono de gran cordialidad. De hecho, según han expresado desde la organización del FeMAP en un comunicado, el Ayuntamiento ha respetado la decisión y ha agradecido que la dirección se lo haya comunicado antes de hacerlo público. Además, desde el consistorio les han trasladado la voluntad de abrirles las puertas si cambian de opinión.
Los miembros de la Comisión de Fiestas de Ripoll se retiraron en bloque
Los miembros de La Comi de Ripoll, la comisión de fiestas que hace años que organiza la Fiesta Mayor y otras actividades como el Carnaval, también anunció que se retiraban en bloque días después de la elección de Orriols como alcaldesa.
"No nos sentimos partícipes de un Ayuntamiento que no tolera a otros colectivos, discriminando de forma directa", afirmaban en un comunicado. Y recordaban que su función es la de montar jornadas festivas de carácter inclusivo, "donde todo el mundo tenga su espacio y pueda disfrutar". Y añadían que "las ganas siguen aquí, pero no nos sentimos con la motivación como para colaborar con este ayuntamiento".
