El pleno de Girona ha aprobado definitivamente el presupuesto de 2025 con una aritmética calcada a la de diciembre (cuando se hizo la aprobación inicial).
El equipo de gobierno ha votado a favor y toda la oposición lo ha hecho en contra. La única diferencia es que, en este caso, ha habido quince votos a favor y diez en contra (porque los concejales Sergi Cot y Raquel Robert no han podido asistir al pleno).
La concejala de Hacienda, Sílvia Aliu, ha subrayado que las cuentas, que ascienden a 164,94 millones, asientan las bases para la “transformación” de Girona y tanto ella como el alcalde, Lluc Salellas, han aprovechado para criticar “la infrafinanciación” que sufren los municipios. La oposición, por su parte, ha calificado el presupuesto de “continuista y poco ambicioso”.