Durante el acto, presidido por el teniente de la alcaldía de Seguridad, Prevención, Convivencia y Régimen Interior, Albert Batlle, y por el jefe de la Guardia Urbana el Intendente Mayor Pedro Velázquez, se han entregado 223 reconocimientos.
Batlle ha querido agradecer y reconocer la labor de la Guardia Urbana al servicio de la ciudad y de los barceloneses y barcelonesas y la colaboración de otros cuerpos policiales, de entidades y de profesionales de diversos ámbitos con el cuerpo de policía barcelonés. “El acto de hoy es un acto de reconocimiento que da visibilidad al compromiso de muchas personas y servicios en la construcción de la seguridad y la convivencia en la ciudad. Todos ustedes están comprometidos de una u otra manera en el combate firme y democrático contra la delincuencia, las ilegalidades, la percepción de inseguridad y el incivismo”, ha destacado. “Su colaboración con el resto de servicios públicos, las entidades ciudadanas y los vecinos y vecinas es crucial para abordar los retos actuales en seguridad y convivencia en nuestra ciudad”.
El teniente de alcalde ha explicado que tanto los servicios policiales, como el resto de servicios públicos tienen muy claro que es necesario poner a las personas en el centro de los esfuerzos. En este sentido ha puesto de ejemplo El Plan Endreça, un plan de refuerzo de la autoridad, la convivencia ciudadana y la excelencia del espacio público. Uno de sus ejes principales es el del refuerzo de la autoridad municipal, sobre todo orientada a la promoción y la garantía de la convivencia. “Un ámbito estratégico y comprometido, porque la convivencia, más allá de la actividad municipal preventiva y sancionadora, interpela al conjunto de la ciudadanía y les pide corresponsabilidad”, ha dicho Batlle, “la convivencia en una ciudad es cosa de todos: del Gobierno y los responsables municipales, pero también del conjunto de la ciudadanía, residentes y visitantes, del conjunto de actores económicos, sociales y corporativos que operan en la ciudad”. El teniente ha puesto en valor el nombramiento de una Comisionada de Convivencia que permitirá pautar un Plan de Convivencia que incluirá la revisión del marco normativo que regula la convivencia en la ciudad e impulsar estrategias de prevención y gestión de conflictos.
“La construcción de la seguridad, en Barcelona y en todas partes, debe abordarse desde una visión integral y estratégica, teniendo en cuenta los miedos y las fragilidades de las personas y los riesgos, estructurales y circunstanciales”, ha dicho Batlle, que ha continuado destacando que el trabajo policial debe estar intrínsecamente vinculado y coordinado con los demás servicios.
“Tenemos por delante retos suficientemente complejos, por eso yo les pediría que el reconocimiento que reciben hoy, la distinción que se les otorga, justa y gratificante, sea, más que un punto de llegada, un estímulo para seguir trabajando por la seguridad de la ciudad”, ha pedido el Teniente, “un estímulo para la exigencia y para la excelencia, valores que deben acompañarnos en todo momento en la misión de servir a la ciudadanía de Barcelona”. Batlle ha explicado que la política de seguridad es sobre todo una política social, “la profesionalidad y el sentido de servicio es fundamental para dar la mejor respuesta a la ciudadanía, y es especialmente en los entornos más complejos donde es necesario dedicar los mayores esfuerzos. Es necesario estar en el lugar adecuado en el momento preciso, preparado y determinado para dar el mejor servicio a las personas y a la ciudad. Y estamos ahí”.