Un total de 22 intérpretes ya consolidados en diferentes disciplinas musicales competirán entre los días 9 y 11 de noviembre para alzarse con la tercera edición del Premio Musical Lauredià organizado por el Comú de Sant Julià de Lòria y la escuela Harmonia con el apoyo del Gobierno. De los 33 inscritos se hizo una selección de los finalistas que según la directora del galardón, Roser Palomero, “fue muy complicada por el elevado nivel presentado”.
El cónsul mayor, Josep Majoral ha hablado de consolidación del evento que “va en línea de nuestra apuesta por la educación como oportunidad de crecimiento”. El mandatario ha asegurado que lo que se busca a través de certámenes como este “es hacer de la parroquia un polo universitario y de atracción para acoger instituciones del ámbito musical”, por eso desea que “sea cual sea el próximo consulado esto tenga continuidad”.

Igual que en ediciones anteriores la primera ronda se hizo de forma telemática, mientras que las semifinales y la final serán presenciales y tendrán lugar en Casa Comuna con un máximo de seis finalistas. La diferencia de este año es que todos son solistas y no habrá grupos de cámara. Los participantes provienen de Corea del Sur, Francia, Bélgica, España, Rusia, Reino Unido y tres nacionalidades más, mientras que los miembros del jurado serán tres y también provienen de diferentes países.
El primer premio consistirá en 5.000 euros y la oportunidad de que quien se lo lleve pueda ofrecer cinco conciertos entre España y Andorra. El segundo, obtendrá 2.000 euros y podrá hacer un concierto y el tercero será ya de 1.000 euros. Tomarán parte violinistas, pianistas, flautistas, acordeonistas y músicos de otros instrumentos. Aunque el canto estaba abierto en anteriores ediciones solo en esta han pasado de ronda dos aspirantes que interpretarán piezas clásicas con acompañamiento de piano.