Este fin de semana pasado, 21 y 22 de septiembre, el Casco antiguo de Torredembarra ha acogido la XIII Feria de Indianos, un evento que se ha consolidado como una cita clave del calendario cultural y turístico de la villa y que ofrece un amplio abanico de actividades que rememoran la relación histórica de Torredembarra con los indianos, aquellas personas que emigraron a América y luego regresaron a sus localidades de origen, algunos de ellos después de haber hecho fortuna.
A pesar de la lluvia que afectó a la jornada del sábado, la feria recibió una gran afluencia de público, con un total de 5.000 personas que disfrutaron de las actividades programadas durante todo el fin de semana.
El programa ofreció un amplio abanico de actividades que incluían visitas guiadas, catas de café y chocolate, espectáculos musicales, talleres y paradas de artesanía, entre otros.
La lluvia del sábado obligó a suspender la plantada y baile de los gigantes indianos y afectó a la actuación del DJ, pero el resto de propuestas se llevaron a cabo con normalidad.
A continuación, se detallan algunas de las actividades más destacadas y su participación:
La feria contó con un total de 32 paradas de artesanía y alimentación, de las cuales 6 eran locales, además de 6 paradas de oficios antiguos.
La participación de comerciantes y entidades locales, junto con la gran afluencia de visitantes generó un impacto positivo en los comercios y la restauración del Casco antiguo y de la calle de Antoni Roig.
Según los datos recogidos, el comercio local experimenta un aumento notable de ventas durante eventos como la Feria de Indianos, que atraen tanto a visitantes de proximidad como a turistas internacionales.
La organización de la feria ha corrido a cargo del Ayuntamiento de Torredembarra, a través de la Concejalía de Turismo y de Comercio, que ha contado con la colaboración de la Red de Municipios Indianos.
También cabe destacar la implicación de entidades locales, como los Gigantes y la asociación de Puntas de Cojín, aunque finalmente no pudieron participar por la lluvia.
La mayoría de los visitantes fueron del Tarragonès, pero también se recibió público de Lleida, Barcelona, Andorra e incluso grupos internacionales procedentes de Alemania, Francia, Bélgica y el Reino Unido, que fueron atendidos en la carpa de información.
La concejala de Turismo y Comercio, Jovita Baltasar, ha valorado muy positivamente esta edición de la Feria de Indianos: “A pesar de las dificultades derivadas de la meteorología, estamos muy satisfechos con la respuesta del público y el impacto positivo que este evento ha tenido en nuestro comercio local. La Feria de Indianos se ha consolidado como un referente cultural y turístico, y continuaremos trabajando para mantener su calidad y atractivo en futuras ediciones”.
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