Un hombre se enfrenta a la petición de 21 años y 10 meses de prisión por matar a su madre, esconder el cadáver en el congelador y robarle la tarjeta para gastarse sus ahorros.
Los hechos ocurrieron en mayo de 2022 en una vivienda de Málaga, pero vieron la luz el 12 de julio, después de que se encontrara el cadáver de la mujer en una alcantarilla a unos 8 metros de profundidad.
Según la acusación de la Fiscalía, la mujer, de 62 años, murió el 25 de mayo de 2022. El ‘Diario Sur’ explica que el hijo menor de la mujer, adoptivo, recibió la cerradura de la puerta de casa y esperó a la mujer dentro de la vivienda acompañado de un amigo suyo, menor de edad.
Su intención era pedirle el número PIN de la tarjeta de crédito, pero cuando llegó la mujer no quiso atender su petición y empezaron a discutir. En un momento de la discusión, el acusado empujó a la madre al suelo, la arrastró por el piso y le dio varios golpes en la cabeza hasta que la mujer le dio el PIN.
No contento con ello, sin embargo, el acusado y su amigo ataron a la mujer, Ángela, de manos y pies y la amordazaron con un trapo y una cuerda. La mujer logró quitarse la soga de la boca, pero los dos jóvenes la asfixiaron hasta que la mataron. Ambos le robaron 900 euros que la mujer había sacado del cajero esa misma mañana y escondieron el cuerpo en un congelador que dejaron en el trastero durante cuatro días.
El 29 de mayo, sacaron el cuerpo del congelador y lo tiraron a una arqueta de la calle, donde el cuerpo estuvo hasta que el 12 de julio alguien lo localizó.
Por todos estos hechos, la Fiscalía considera que el acusado cometió un delito de asesinato con traición, robo con violencia, profanación de cadáver, todo con la agravante de parentesco y la eximente incompleto de alteración mental. Pide una pena de prisión de 21 años y 10 meses, además de una indemnización de 120.000 euros y 900 euros más para los demás hijos de la mujer.
Aparte de los dos acusados hay dos mujeres más acusadas de encubrimiento. Los dos asesinos explicaron los hechos a la madre del menor y a la mujer del hijo de la víctima, y ambas les recomendaron esconder el cuerpo. Además, tras el crimen, las dos mujeres se mudaron a casa de Ángela y guardaron las pertenencias de la mujer al trastero donde antes habían escondido el cuerpo. Por todo, la Fiscalía pide para ellas penas de tres años de prisión.
