Las autoridades investigan unos hechos en los que un coche entró en el aparcamiento de un hospital y arrojaron el cuerpo de un hombre que murió poco después. Según indican fuentes oficiales, la víctima estaba en parada cardiorrespiratoria y se le intentó reanimar, pero sin éxito.
Los hechos sucedieron el pasado viernes, 29 de septiembre, por la tarde. Un vehículo entró en el aparcamiento del hospital de Valme, en Sevilla, y después de dar un par de vueltas abrieron una de las puertas del coche y soltaron el cuerpo de un hombre.
Un vigilante de seguridad del recinto vio la situación y se acercó para auxiliar a la víctima, alertando a los servicios médicos del mismo hospital. Personal sanitario intentó reanimar al hombre, que había quedado tendido en el suelo, porque ya se encontraba en parada cardiorrespiratoria.
Desgraciadamente, sin embargo, los médicos no consiguieron reanimarlo y certificaron su muerte. El hombre presentaba múltiples heridas y signos evidentes de haber sido apaleado y apuñalado.
La Policía Nacional está investigando los hechos, pero según ha indicado el delegado del gobierno español en Andalucía, Pedro Fernández, aún no hay personas identificadas ni detenidas por estos hechos.
La principal hipótesis con la que trabajan los investigadores es que los sospechosos habrían agredido al hombre, de 42 años y vecino de Lebrija, y que llevaron al hombre al hospital después de ver la gravedad de su estado, huyendo para evitar ser pillados.