La Policía Nacional ha detenido al responsable de una nave industrial de Mollet del Vallès que se utilizaba para el cultivo de marihuana. En los registros, hechos en junio, se intervinieron 1.350 plantas, 260 gramos de cogollos y 1.414 de marihuana picada. La plantación correspondía a un entramado criminal perfectamente organizado con varios integrantes, de los cuales solo se ha podido detener a uno. La investigación condujo a los agentes a una segunda planta en Sant Fost de Campsentelles, que había sido desmantelada a toda prisa pero con rastros evidentes de la actividad. El detenido está acusado de los delitos de pertenencia a organización criminal, contra la salud pública y defraudación de fluido eléctrico, y ha quedado en libertad con cargos.
En la segunda nave, donde estaba la plantación desmantelada, se encontraron estancias perfectamente habilitadas, con invernaderos y unos 3.000 tiestos, y con sistemas de seguridad, como cámaras y una puerta reforzada con barras de hierro. Aquí, sin embargo, solo se encontró 1,41 kilos de marihuana.
En las medidas que hicieron técnicos de la compañía eléctrica se constató que se utilizaba el fluido de manera fraudulenta para mantener las plantaciones. Además, las personas que se encargaban, según destaca la policía en un comunicado, vivían en la misma nave en condiciones de insalubridad, rodeados de material altamente peligroso y tóxico, y con riesgo de incendio. La investigación, que asume la brigada local de la policía judicial de Cornellà de Llobregat, continúa abierta.