Cataluña perdió casi un 24% del agua potable en 2022, mayoritariamente por las fugas. El año pasado se perdieron unos 134.300 millones de litros, 134 hectómetros cúbicos, según datos de la Agencia Catalana del Agua a los que ha tenido acceso RAC1.
Con esta agua se podría llenar casi todo el Pantano de Sau y Cataluña tendría ahora el doble de reservas. Este porcentaje de fuga es ligeramente inferior al del Estado y está en la media europea.
La consejera de Acción Climática, Teresa Jordà, ha dicho en la misma emisora que conoce las dificultades de los municipios, especialmente de los pequeños, pero ha defendido tener un régimen sancionador, que “solo sirve para disuadir”. Se ha mostrado convencida de que no hará falta multar a ningún municipio.